Según los datos de la Delegación Provincial de Agricultura a los que ha tenido acceso Europa Press, el país norteamericano mantiene la campaña hasta el 30 de abril, con lo que el volumen exportado supone algo más del diez por ciento del total permitido por la Administración estadounidense, que es de 17 millones de kilos.

Para la venta del pimiento de Almería en Estados Unidos, los productores y comercializadores de la provincia tienen que cumplir los requisitos fitosanitarios impuestos por la Administración estadounidense, de manera que se garantice que el producto está exento de la denominada 'mosca de la fruta' y evitar así la introducción de la plaga 'Ceratitis capitata' en dicho país.

Para ello, y con el fin de garantizar que el producto no se vea afectado por dicha plaga, Estados Unidos exige implantar una red de trampeo dentro y fuera de los explotaciones para proteger las producciones, tanto en el invernadero como en el almacén de manipulado y envasado. En la campaña actual han obtenido el visto bueno para exportar al país norteamericano 21 empresas, que son las que han obtenido el plácet de una entidad certificadora —en estos casos, de Agrocolor—, y la autorización preceptiva de la Delegación Provincial de Agricultura.

De los 259 invernaderos que optaron esta campaña a cultivar pimiento para Estados Unidos, han sido autorizados 238, que en su conjunto suman 256 hectáreas, de las cuales 254 se dedican al cultivo de la variedad 'California', y dos al 'Italiano'. El resto de explotaciones no superaron la auditoría inicial realizada por la entidad de certificación entre el 1 de octubre y el 1 de diciembre, ni las inspecciones de mantenimiento que se efectúan entre el 1 de diciembre y el 31 de abril.

Como consecuencia de las inspecciones realizadas hasta ahora y de la renuncia de algunas empresas, se han dado de baja 62 invernaderos que han alegado especialmente agotamiento de cuota, por lo que en la primera quincena de marzo son 176 los invernaderos que cultivan pimiento con el visto bueno para su entrada en Estados Unidos.

En estos días, se realiza la segunda y última vuelta de inspecciones a invernaderos, que está previsto que termine a finales de marzo. Hasta el 30 de abril continuarán los conteos de las 19 trampas localizadas en la red exterior, así como con la remisión a la Delegación de Agricultura de los conteos de las trampas situadas en los invernaderos cuya responsabilidad recae sobre empresas inscritas.

Dentro del manual de procedimiento, a la Delegación de Agricultura le corresponde inspeccionar al menos el 25 por ciento de los invernaderos y almacenes inscritos en la campaña. Estas inspecciones son un control de calidad del trabajo realizado por las entidades de certificación. Hasta mediados de marzo, y una vez inspeccionado el 25 por ciento de invernaderos, no se han detectado infracciones de los requisitos a cumplir.