El Centro Cultural Bancaja de Valencia abre temporada expositiva con la exposición 'Sanleón. Domus Dei', en la que el artista emprende un viaje hacia la espiritualidad marcado por las tonalidades blanca y negra para sintetizar "las emociones, el silencio y la austeridad" que impregnan los lugares de culto.

Así lo ha explicado José Sanleón (Catarroja, Valencia, 1953) durante la presentación de la muestra, en la que ha estado acompañado por el vicepresidente de la Fundación Bancaja, Vicente Montesinos, y el comisario, Rafael Sierra.

La selección, que se podrá visitar hasta el próximo 26 de agosto, reúne una treintena de piezas "recientes e inéditas" con las que el autor recupera la íntima relación que a lo largo de la historia han mantenido lo artístico y lo espiritual. No se trata, sin embargo, de una propuesta religiosa, ha aclarado Sanleón, que ha apuntado que no es creyente, sino de un intento de captar "las sensaciones de silencio interior que se viven en una catedral".

El proyecto ha supuesto además cambios "sustanciales" en la temática y técnica del artista, aunque "no una ruptura radical" con su anterior gran exposición, la que se vio en el IVAM en 2007. De hecho, la muestra de Bancaja se abre con una videoinstalación que recrea el juego de luces y sombras, un género que hasta el momento el artista valenciano no había cultivado y que, ha confesado, no sabe si volverá a repetir.

Seguidamente, el espectador se adentra en una sala en la que, a través de escultura metálicas abstractas, el autor reinterpreta la arquitectura religiosa barroca, como las gárgolas, los capiteles y los retablos. El último espacio está dedicado a la pintura con una serie de cuadros en blanco y negro que representan la pureza.

MESSI,

Un nuevo "dios"

Sanleón ha señalado que lo sagrado tiene difícil definición porque es "susceptible de entenderse según la época y la forma de concebir la vida de cada uno". "Hace un siglo era Dios y la Iglesia; hoy no sé, si por suerte o por desgracia, creo que es más bien esto último, la religión es el fútbol y dios es Messi", ha observado.

Preguntado por la "fidelidad" que a lo largo de su carrera ha mostrado al claroscuro, el artista ha comentado que forma parte de su "sensibilidad", así como de la identidad de la "sociedad española". En este sentido, ha recordado que los grandes nombres de la pintura del siglo XX, como Picasso, Saura, Tàpies o Millares "son la historia del blanco y el negro".

Aun así, ha apuntado que, en ocasiones, ha incluido en sus piezas tonos que "odia" con el fin de "ir en contra" de él mismo. "Intento evitar, en la medida de lo posible, ser siempre el mismo. Quiero que el cuadro me plantee retos para ver qué pasa", ha manifestado. Esta filosofía de trabajo, matiza, "no es improvisación", sino que su actividad varia "en función de las necesidades que van surgiendo".

Por su parte, Rafael Sierra ha explicado que la exposición comenzó a gestarse hace tres años, después de que el comisario llevara adelante una exhibición de arte contemporáneo en la Catedral de Burgos. De este modo, el objetivo ha sido rescatar la "prolífica" relación entre arte y espiritualidad que se ha producido durante siglos y que, tras el paréntesis que supuso la desamortización de Mendizábal, volvió a emerger en el siglo XX.

Más exposiciones

Finalmente, Vicente Montesinos ha subrayado que con esta exhibición "Bancaja continúa con su compromiso de acercar la cultura, y de nuestro entorno, a la sociedad". Igualmente, ha incidido en que la Fundación, "a pesar de lo que se dice por ahí, sigue haciendo los trámites necesarios para hacer en un futuro más exposiciones".

Con ocasión de la muestra se ha editado un original catálogo, con forma de misal, que reproduce las obras seleccionadas, una entrevista al artista y un texto del comisario.