Haulotte justifica su cierre en los malos resultados que la planta arrastra desde el principio de su actividad

La firma francesa Haulotte ha justificado la decisión de cerrar la planta de Reocín (Cantabria) y que conlleva el despido de sus 72 trabajadores, en los malos resultados económicos que la planta arrastra desde el principio de su actividad en España, cifrando en 20 millones de euros las pérdidas en los últimos cinco años.

En un comunicado, Haulotte explica que ha comunicado a sus trabajadores de la planta de Puente San Miguel la decisión de cesar la actividad productiva del centro que, según la empresa, se ha visto "decisivamente perjudicada" por el estancamiento del sector de la construcción en España, principal mercado de los productos fabricados en Reocín.

Explica así que la decisión de finalizar los trabajos en la fábrica de Reocín se fundamenta en los malos resultados económicos que la planta arrastra desde el principio de su actividad en España y las "malas perspectivas" de recuperación del sector de la construcción en España a corto y medio plazo.

Esta medida afecta a los 72 empleados de la planta de Haulotte, que ha señalado que ha comunicado a los trabajadores y autoridades laborales que desea iniciar "cuanto antes" el proceso de negociación y ha trasladado su deseo de alcanzar un acuerdo "que beneficie a todas las partes en la medida de las posibilidades".

En este sentido Haulotte ha avanzado que propondrá un plan social y de recolocación "que ayude a paliar los efectos negativos del cese de actividad productiva", señala el comunicado.