Los tres sindicatos más representativos en la Ciudad Autónoma de Ceuta (UGT, CCOO y CSIF) han decidido dejar "en pausa" las movilizaciones que, en forma de concentraciones y pitadas, han venido protagonizando todos los días desde que, el pasado lunes, el consejero de Hacienda del Gobierno local, Francisco Márquez (PP), anunciase la aprobación de un conjunto de medidas para eliminar las jornadas partidas y especiales; congelar las ofertas públicas de empleo, promociones internas y consolidaciones; revisar todos los Convenios del sector público y "homegeneizar" sus retribuciones, entre otros ajustes.

Tras su primera reunión cara a cara en la Mesa General de Negociación de la Ciudad, los representantes de los trabajadores han aceptado las "disculpas" ofrecidas por Márquez en relación con "las formas" utilizadas para dar a conocer los planes del Ejecutivo y su disposición a negociar "todo" lo aprobado por el Consejo de Gobierno.

"Lo que parecía que iba a ser una imposición va a ser, según el compromiso adquirido por el Gobierno, una negociación caso por caso de todas las medidas planteadas, lo que cambia radicalmente el escenario", han explicado los responsables de FSP-UGT y FSC-CCOO en Ceuta, Juan Carlos Pérez y Emilio Postigo, en declaraciones a Europa Press.

De entrada, el Gobierno que preside Juan Vivas ha retirado la cancelación decretada de todas las promociones internas y consolidaciones empleo en curso, expedientes "cuya culminación no supone coste extra alguno para la Administración", según Ricardo Martínez (CSIF), y ha limitado a "unos 230 trabajadores, menos del 15 por ciento del total", la aplicación de la supresión de las jornadas partidas y especiales "no imprescindibles".

El Ejecutivo local también ha aceptado negociar "en bloque" la revisión de los Convenios Colectivos de sus cerca de 20 sociedades municipales y organismos autónomos, cuyas condiciones laborales y salariales se quieren "homologar" a las del personal del Ayuntamiento, más bajas.

Ciudad y sindicatos negociarán "mañana y tarde, si es preciso" la elaboración de un nuevo Convenio Colectivo y Acuerdo Regulador para el personal público local "adaptado a los tiempos de crisis que vivimos" que pueda ser aprobado "antes del 31 de marzo, cuando se prevé que entren en vigor los nuevos Presupuestos Generales del Estado" con el compromiso de revisarlo "en función de la evolución de la situación económica general".