El presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (Scrats), José Manuel Claver, ha dicho esperar que el nuevo ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, anuncie este miércoles un Plan Hidrológico Nacional (PHN) construido sobre los "mimbres de llevar el agua de donde sobra a donde falta", y que se ejecute "cuanto antes", a ser posible, en los dos primeros años de legislatura, para que se pueda llevar a afecto "en gran medida" antes de que acabe la legislatura.

En concreto, los regantes esperan que Arias Cañete haga este anuncio durante su comparecencia este miércoles en la Comisión de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente del Congreso de los Diputados, que se constituyó el pasado 17 de enero y que preside José Ignacio Llorens.

Precisamente, Claver y la Junta Directiva de la Federación Nacional de Comunidades de Regantes serán recibidos este miércoles a las 18.00 horas por el ministro, y el presidente del Sindicato de Regantes espera poder tratar este asunto con Arias Cañete a lo largo del encuentro.

Así lo ha hecho saber Claver en una rueda de prensa que ha ofrecido poco después de mantener un encuentro con el presidente del Gobierno regional, Ramón Luis Valcárcel, a quien le han transmitido su inquietud por que el PHN "solucione los problemas de todos los españoles, y no sólo de los murcianos, ya que hay agua suficiente".

En este sentido, Claver ha mostrado su deseo de que "cuanto más se luche este pacto, mejor" ya que las condiciones políticas "son las idóneas" porque es ahora "cuando se tienen las mayorías suficientes para ello".

Al respecto, Valcárcel ha asegurado a los regantes que el Gobierno de la nación "va a optar por políticas de que a la cuenca del Segura tiene que venir agua desde donde sobra", y se va a optar por "políticas de trasvases".

Claver ha dicho desconocer de dónde procederá el agua, y ha señalado que es un problema que "en principio da igual a los regantes, siempre que el coste del agua en la Región sea asequible para su uso en la agricultura". Así, ha recordado que el regante del trasvase "paga tres, cuatro y, a veces, cinco veces lo que se paga en otros sitios por el agua".

De hecho, ha reconocido que en la reunión con Valcárcel se ha hablado "del trasvase del Ebro y de cualquier otra posibilidad, como el trasvase del Tajo". "Hemos hablado del sinfín de posibilidades que pueden permitir traer el agua a esta tierra", según Claver, quien ha dicho que en el futuro "habrá que concretar".

De todas formas, ha estimado que lo importante es que "primero haya un gobierno decidido a hacerlo y que haya optado por esa vía". Una vez que todo sea así, ha indicado que "habrá que hacer aportaciones tanto del ámbito político como de los usuarios" y, si no hay acuerdo, ha augurado que el Gobierno "tendrá que tomar una decisión".

"cambio de tono" en representantes manchegos

Asimismo, el presidente del Scrats ha expuesto a Valcárcel la situación del trasvase y le han transmitido que se han sentido "impactados" por haber detectado un "cambio de tono" en los representantes de Castilla-La Mancha en la Comisión de Explotación del Trasvase, que ha dado fin a la "alta crispación" de los últimos años.

Claver ha recordado que no había asistido a ninguna reunión de la Comisión en los últimos años en las que no hubiera "un altísimo grado de crispación". Y es que "aunque hubiera agua, los representantes manchegos siempre fijaban de entrada que había agua para beber pero no agua para regar".

En la última reunión de la Comisión, sin embargo, la postura de Castilla-La Mancha fue la de "aceptar las normas que regulan el trasvase Tajo-Segura", y aunque sus representantes defendieron la postura de Castilla-La Mancha, reconocieron que lo que había que hacer era "el cumplimiento estricto de las normas y reglas que regulan el trasvase Tajo-Segura".

Gracias a este apoyo y con el consentimiento manchego, la Comisión aprobó el desembalse de "228 hectómetros cúbicos, que permitirán atender en su totalidad las demandas de agua para riego". Por ello, Claver considera "digno de tenerse en cuenta y de resaltar" este cambio de tono".

Respecto a la actitud de los representantes del Gobierno central, Claver ha reconocido que no ha habido un "gran cambio", pero ha recordado que el director general "llevaba apenas 15 días en la Comisión de Explotación". Asimismo, ha indicado que las decisiones de la Comisión no se aprueban "libremente", sino que vienen propuestas desde arriba", por lo que "no hay discusión", ha zanjado.

Claver ha recordado que el Gobierno manchego de María Dolores de Cospedal "recurrió el primer trasvase porque, en ese momento, se aprobó el desembalse de más agua de lo que contemplaba la regla de explotación". Sin embargo, el presidente del Sindicato ha señalado que "en el cómputo general, el agua que se trajo estaba muy por debajo de las normas de explotación".

De todas formas, ha justificado el recurso que planteó entonces el Ejecutivo manchego porque "acababan de llegar al Gobierno". Y es que Claver estima que la postura anterior de Castilla-La Mancha no es coherente con la actual, que ha considerado "más firme y con más convencimiento", encaminada "al cumplimiento de las normas".

"Si las normas no valen, habrá que cambiarlas", ha señalado Claver, quien no obstante ha señalado que este cambio en la normativa no está previsto, ya que es un tema que depende de la Comisión Central de Explotación".

De todas formas, el Scrats no ha pedido el cambio de las reglas ni es su "principal preocupación" ya que están dando un resultado "correcto". De hecho, ha considerado que las reglas no son inmutables y si las circunstancias "cambian, también tendrán que cambiar las reglas, en un sentido o en otro".

Al ser preguntado por hasta qué punto estarían dispuestos a ceder para lograr el PHN, Claver ha considerado "difícilmente comprensible" que el trato implique "ceder parte del trasvase Tajo-Segura".

A su juicio, no se trata de ceder "algo de agua", sino que se trata de que "se colmen las necesidades de agua de aquí y de allí". En cualquier caso, ha descartado que esto implique "desvestir un santo", sino completarlo con recursos y hacer una explotación "con la que todos podamos tener una adecuada satisfacción de nuestras necesidades".

Por ejemplo, ha tachado de "absolutamente disparatado" el borrador del Plan Hidrológico del Tajo porque contempla unas demandas "inexistentes" y está "teledirigido a cargarse el trasvase Tajo-Segura".

Tarifas de peaje

Por otra parte, Claver se ha mostrado preocupado por la subida de las tarifas de peaje, ya que ha provocado una subida "muy gravosa, de cinco a 8,9 céntimos". Por ello, ha anunciado que el Scrats la recurrirá en cuanto sea publicada.

No obstante, ha recordado que la tarifa del trasvase Tajo-Segura se ha conseguido bajar cinco céntimos, pero cree que "se podía haber bajado más". El problema en su opinión es la inclusión en la tarifa de la liquidación de los años 2008 y 2009.

A juicio del Scrats, estas dos anualidades no se debían haber incluido porque estaban dentro del periodo de sequía, cuando los regantes estaban exentos de pagar los apartados A y B de la tarifa.