El Ayuntamiento de Santander limitará la velocidad en el área de la calle Floranes con el objetivo de crear una nueva "zona 30", que se sumará a las que ya existen en la ciudad.

Así lo anunciaron los concejales de Movilidad Sostenible, Carmen Ruiz, y el concejal de Protección Ciudadana, Antonio Gómez, a los miembros de la asociación Cantabria ConBici y a los representantes de las AAVV y de comerciantes de la zona.

Los ediles explicaron que la actuación que afectará a la calle Floranes, desde Camilo Alonso Vega hasta la Plaza de Numancia, y sus transversales, excepto la calle Perines -por tratarse esta última de una vía para "pasar"-, consiste en limitar la velocidad a 30 kilómetros por hora con el objetivo de "mejorar la seguridad de los peatones y recuperar la calle como lugar de convivencia".

"Se trata de una actuación de calmado de tráfico, prevista en el Plan de Movilidad Sostenible, que persigue ajustar la velocidad e intensidad del tráfico de automóviles a niveles compatibles con una utilización peatonal y ciclista, segura y confortable, de nuestro espacio público urbano", afirmó Ruiz.

En este sentido, hizo hincapié en que, con esta iniciativa, el Consistorio santanderino "reitera su compromiso de dar más protagonismo a los peatones, facilitar el uso de las bicis en la ciudad y aumentar la seguridad vial, reducir el riesgo de accidentes, así como las emisiones contaminantes y el ruido".

La concejala de Movilidad Sostenible insistió en que, según diferentes estudios, cuando la velocidad se reduce de 50 a 30 Km por hora, baja en más del 50 por ciento el número de accidentes y en un 90 por ciento los muertos o heridos graves.

Otras "zonas 30"

El concejal de Protección Ciudadana recordó que el Ayuntamiento de Santander puso en marcha, en febrero de 2011, las tres primeras zonas con velocidad limitada a 30 kilómetros/hora para el tráfico, como una experiencia piloto, encaminada a mejorar la seguridad vial en la ciudad, especialmente de los peatones.

Gómez indicó que de las "zonas 30" existentes, tres corresponden a calles céntricas de la ciudad -a la que se sumará la de nueva creación- y una a un área residencial, comprendida en el Grupo Ateca.

"Una de las zonas con velocidad limitada, está dentro del área delimitada por las calles Calvo Sotelo, Paseo de Pereda, Casimiro Sainz, Santa Lucía, Guevara, Santa Clara, Rualasal y Lealtad, que no forman parte de ella, sino de su perímetro", precisó el edil, quien señaló que la otra zona corresponde a la Plaza del Progreso y está limitada por las calles Nicolás Salmerón, Antonio López, Atilano Rodríguez y Castilla, donde hay viales muy estrechos.

El concejal de Protección Ciudadana apuntó que también la calle Tetuán es una "zona 30", al igual que el Grupo Ateca.

Además, Gómez se refirió a otras medidas impulsadas desde el equipo de Gobierno del Consistorio santanderino, para reducir la velocidad e incrementar la seguridad vial en la ciudad.

Entre ellas, destacó el establecimiento de dispositivos de la Policía Local a la entrada y salida de centros educativos, la construcción de nuevas rotondas, que contribuyen a disminuir la velocidad o la instalación de los paneles informativos sobre la velocidad a la que circula el vehículo que conducimos.