La Federación de Sanidad de Comisiones Obreras (CC.OO) en Castilla y León ha pedido a la Junta que se suspendan las renovaciones al personal facultativo de entre 65 y 70 años para que 500 residentes, "la mayoría médicos", puedan conservar su empleo a partir del próximo mes de mayo, cuando concluyen sus contratos.

Así lo ha explicado este jueves el secretario de Acción Sindical de la Federación, Jaime Redondo, quien ha apuntado que la opción de apostar por renovar los contratos al personal residente permitiría una "mayor eficiencia" debido a que podría desarrollar "una labor asistencial plena", dado que "no estaría exento de realizar guardias", como sí ocurre con los mayores de 55.

Por ello, el secretario general de la Federación, Pablo Vicente, ha reclamado que los mayores de 65 se jubilen y "puedan dejar espacio" para unos jóvenes que "si se marchan de aquí será muy difícil recuperarlos".

Esta medida forma parte de las propuestas que el sindicato ha presentado a la Consejería de Sanidad para modificar las medidas anunciadas por el Ejecutivo autonómico para ajustar el gasto en este servicio público.

Entre ellas, CC.OO. ha pedido que se "eliminen duplicidades" en la gestión y se aplique "estrictamente" la ley que regula el trabajo privado para "no caer en incompatibilidades".

En declaraciones recogidas por Europa Press, Vicente ha subrayado que "si la ley de medidas es fruto de una situación coyuntural", debe recogerse en la misma que "cuando pase esta coyuntura, se volverá a la situación previa en las condiciones laborales"; que, "si es verdad que no va a haber minoración de salarios", se establezca en la norma, y que, "si es cierto que hay un absentismo exagerado, se identifique y se erradique".

Al hilo de esto último, el responsable autonómico de la Federación de Sanidad ha lamentado la "falta de información" sobre las cifras reales y ha tachado de "injusta" la propuesta de que, a partir del cuarto mes de baja, se produzca una disminución del 25 por ciento en la retribución, ya que resulta "muy duro para un trabajador que tenga la desgracia de sufrir una enfermedad grave".

Garantizar la calidad

Por todo ello, Vicente se ha preguntado si se podrá "garantizar la calidad que se presta a la ciudadanía" con estas reformas y ha pedido a la Administración "sentido común", al tiempo que ha solicitado "agotar el cauce de la negociación", aunque ha planteado la posibilidad de "recurrir a la movilización" si no obtienen respuesta.

En este sentido, ha cargado contra el consejero de Sanidad, Antonio María Sáez Aguado, y lo ha acusado de tratar a los profesionales "como a bellacos", en relación a la misiva enviada a los 22.000 trabajadores de Sacyl en la que se pedía una "contribución" para "preservar el servicio" ante la situación de crisis.

Pablo Vicente ha tildado al consejero de "el más mediático" que ha pasado por el Ejecutivo de la Comunidad y ha criticado su "falta a la verdad", puesto que "no es cierto que haya habido negociación", dado que "no la entiende como el resto de los mortales", sino que "se sienta, muestra sus planteamientos y no escucha los de los demás".

También ha negado que las medidas "no vayan a afectar al empleo", ya que "el ahorro previsto de 100 millones de euros en sustituciones" supondrá "la no contratación de miles de trabajadores".

Por su parte, Jaime Redondo ha subrayado que el "blindaje" de los servicios públicos anunciado por el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, supondrá "la imposibilidad de modernizar la estructura de decisión y el cierre de las puertas a la negociación", al tiempo que "se carga todo al trabajador y nada a la gestión". "INACEPTABLE"

Por ello, ha insistido en que "es inaceptable que se considere culpable al trabajador", y ha advertido de que si las medidas de racionalización se limitan "a ampliar la jornada laboral" de los facultativos podrá favorecer "un aumento del error".

Asimismo, el secretario de Acción Sindical ha subrayado que la Consejería que dirige Sáez Aguado es "la única que ha anunciado sus medidas antes de que se celebren las distintas mesas de negociación".

"No merecemos este trato", ha concluido, por su parte, Pablo Vicente, quien ha recordado la "satisfacción" de la ciudadanía con el trabajo de los empleados de la Sanidad de Castilla y León, la cual puntúan "con un notable alto".