Después de una gira por toda la provincia, la obra 'Federico Vive' llega este viernes al teatro Isabel la Católica de Granada de la mano de la compañía 'Teatro para un instante' y la dirección de Miguel Serrano.

El diputado delegado de Cultura de la Diputación de Granada, José Antonio González Alcalá, ha calificado este espectáculo como "una Barraca del siglo XXI" cuya ruta comenzó en el tradicional homenaje a Federico en el parque que lleva su nombre en Alfacar, donde se estrenó este espectáculo que desde entonces ha recorrido con gran éxito todas las comarcas de la provincia llegando también a Cataluña con una representación en Gerona.

De una hora de duración, 'Federico Vive' se conforma como un homenaje al poeta de Fuente Vaqueros articulado en torno a textos, personajes y temas musicales del universo lorquiano. El viaje se inicia en la etapa de juventud de Lorca, con el personaje Mosquito, de la 'Tragicomedia de don Cristóbal y la señá Rosita'. Luego, son los personajes de 'Mariana Pineda' y 'Doña Rosita la Soltera' los encargados de plasmar su madurez. Ya en la última parte de la dramatización, salen a escena los arlequines de 'Así que pasen cinco años' junto a otros de 'Bodas de Sangre' y 'La Casa de Bernarda Alba'.

La compañía 'Teatro para un Instante' se ha especializado en Federico de una década a esta parte. Siete de sus actores interpretan en 'Federico Vive' a los diferentes personajes lorquianos. En la mayoría de las ocasiones, son los mismos que interpretan esos personajes cuando la compañía lleva a escena las distintas obras del poeta y dramaturgo de Fuente Vaqueros. El reparto está acompañado por seis músicos de formación clásica.

Piano, viola, violín, clarinete, violonchelo y percusión conforman un cuerpo musical cuya presencia es constante durante la representación ya sea acompañando a los actores en sus recitativos y canciones, o participando como solistas.

El compositor de la música que se interpreta en este espectáculo, Pablo Sánchez de Medina, se encarga también de la dirección del sexteto.

Aunque el guión y la puesta en escena corren a cargo de Miguel Serrano, la práctica totalidad de las palabras que se dicen en esta pieza pertenecen a Federico García Lorca. El resultado es un ahora de emociones, sentimientos, reencuentro y recuerdo, en la que público e intérpretes se unen para honrar la memoria de Federico sin eludir su muerte, pero aludiendo sobre todo a su vida, a su obra, y a su simpatía y talento arrolladores.