La moda masculina se pone cómoda. Así lo demostró ayer Armani en la última jornada de la Semana de la Moda de Milán, que dio las pautas de estilo para el otoño e invierno del año próximo.

El cuero, el tweed, el terciopelo, la pana y el punto fueron las notas predominantes de su colección, en la que no faltaron detalles bohemios como boinas, chalecos y mitones. El diseñador italiano presentó también su nuevo concepto de traje: chaqueta ancha y pantalones sueltos y holgados como si fueran pijamas, estrechos en el tobillo.

Aunque Dsquared2 y Diesel Black Gold se desmarcaron con la tendencia opuesta: trajes cortos y estrechos, que parecen haber encogido en la lavadora -los modelos parecían llevar una talla menos de la que les correspondía-. Un estilo con el que sin duda se sentirá identificado el entrenador del Barça, Josep Guardiola, muy aficionado a llevar trajes ajustadísimos.

Aun así, el concepto prenda-pijama también estuvo presente en los desfiles de Dsquared2 y Diesel con las tradicionales rayas, que se apoderan de las chaquetas y chalecos. El pelo y los cuadros, protagonistas de la pasada temporada, aún se resisten a dejar la pasarela.

Armani Underwear y Armani Jeans, divisiones de la firma italiana para lencería y ropa vaquera, también acaban de presentar su nueva campaña, que este año vuelve a protagonizar Rihanna. Ambas colecciones contarán con prendas que ha diseñado la cantante de Barbados y que la propia firma describe como "innegablemente femeninas y de precios razonables".