El pasado domingo la sala 088 de los Mossos recibió una llamada de Ciutadans de Catalunya anunciando el acto y pidiendo la presencia policial.

El jefe policial de turno comunicó al requeriente que tenía que comunicar por escrito la organización del acto, los responsables y la motivación de la solicitud, entre otras cuestiones.

Además, se pidió a la plataforma que organizara un servicio de seguridad que filtrara el acceso al recinto, "responsabilidad de los convocantes", y que detallara las medidas de seguridad previstas.

A pesar de que el responsable policial facilitó un número de fax, la plataforma no facilitó ninguna documentación relativa al acto, pero los Mossos organizaron un dispositivo de control y protección ante posibles disturbios con seis agentes de paisano y ocho de uniforme.

Los efectivos se presentaron en el Auditori Narcís de Carreras una hora antes de empezar el acto y "constataron que había algunas personas de signo contrario a los convocantes".

El responsable de seguridad designado por los organizadores no se presentó hasta diez minutos antes de iniciarse el acto.

La Policía catalana le requirió "de nuevo" para que organizara un dispositivo interno de orden, aunque los organizadores "no establecieron ningún filtraje".

Cuando llegó Espada y otros asistentes al acto, hubo un "griterío por parte de un grupo reducido de personas contrarias al acto".

Espada "comunicó a un mosso d'esquadra que había recibido una agresión, que no fue observada por los efectivos policiales".

"Se le pidió que ofreciera algún detalle del agresor para poder actuar, pero no ofreció ninguna explicación", señala el comunicado oficial.

Una vez terminada la conferencia, los organizadores salieron del edificio por una salida lateral, "a instancias del jefe policial del dispositivo y para evitar posibles incidentes".

En este trayecto "de unos centenares de metros", el cordón policial "fue testigo de numerosos gritos e insultos" contra los representantes de la plataforma, "pero en ningún caso los efectivos policiales observaron ninguna agresión física".

Actitud ineficaz

Por su parte, Espada dijo que "hubo una actitud improcedente e ineficaz" de los Mossos, que "no fueron capaces de asegurar los derechos de los ciudadanos que ejercían su libertad de expresión".

En su opinión, "de manera indiscutible e intolerable, los Mossos d'Esquadra incumplieron el reglamento en lo que se refiere a las relaciones con la comunidad.

Esto es porque no impidieron que un grupo de nacionalistas provocadores amenazantes" sometiera "a una vejación verbal continuada e incluso física" durante el acto de ayer.

Espada remarcó que él recibió un leve golpe en la cabeza y meneos, pero insistió en que los que le protegieron resultaron más afectados, si bien también fueron incidentes de carácter leve.

Reacciones

El PP propuso en la Junta de Portavoces del Congreso la aprobación de algún tipo de declaración institucional de condena de la agresión.

Así lo indicó en rueda de prensa el portavoz del Grupo Popular, Eduardo Zaplana, quien afirmó que, cuando planteó su idea en la Junta de Portavoces, obtuvo el visto bueno de todos los grupos parlamentarios.

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