El objetivo del informe es analizar cuáles son las principales preocupaciones del sector industrial de la isla, que considera que "con más de 5,3 millones de personas sin empleo en España, casi 100.000 en Baleares, no hay duda de que emprender una reforma laboral es un asunto urgente".

"Su aprobación es de tal trascendencia que ello debería empujar a los responsables finales de su aprobación, a actuar con cautela y sentido común. Llevamos mucho tiempo hablando de la reforma laboral y, si bien es cierto que ya se han conseguido acuerdos importantes en materia de control de bajas y ausencias laborales, prejubilaciones, los caballos de batalla continúan siendo la negociación colectiva y la posible revisión salarial", han manifestado al respecto mediante un comunicado.

Tras entrevistar al 100% de las empresas del sector industrial, concretamente son unas 620 pymes, se constata que tras el acceso al crédito, los costes laborales son la principal preocupación de nuestros empresarios. En una escala del 1 al 6, las empresas colocaron la contratación, los despidos y los costes de la seguridad social como el elemento que más les subyugaba y preocupaba a la hora de emprender un negocio o poder mantener la viabilidad de sus empresas actuales.

Una pequeña y mediana empresa con una media de 2 a 4 trabajadores, puede llegar a pagar anualmente entre un 60 y un 70% del coste laboral derivado de la contratación de sus trabajadores. "Un coste en ocasiones demasiado elevado para un emprendedor que desee iniciar su actividad o una pequeña empresa", han apuntado.

"Si a eso le sumamos los elevados costes que pueden derivarse también de un posible despido o la poca accesibilidad al crédito y la complejidad burocrática que requiere, mantener un negocio abierto o emprenderlo se hace, a menudo, excesivamente caro y complicado para los tiempos que corren", añaden desde la asociación adherida a Pimem.

"De lo que no cabe duda es de que las Pymes de Baleares, no únicamente las del sector industrial, sino todas, tienen mucho que decir sobre la aprobación o no de la nueva reforma laboral puesto que de ella depende, en gran medida, la viabilidad y supervivencia de sus empresas y en consecuencia la reactivación de nuestra maltrecha economía".

Por último, se destaca que "la polémica reforma que nos ocupa está aún abierta, y el Gobierno, aunque parece que tendrá en cuenta las indicaciones de los agentes sociales, legislará en el resto de materias en las que no haya acuerdo", han avisado.

El Ejecutivo tiene previsto aprobar en el primer trimestre de este año su proyecto de ley de la reforma laboral.