El cambio de los modelos familiares y la escolarización obligatoria son algunas de las causas del aumento de trastornos mentales en los adolescentes. «Los jóvenes deben adaptarse a cambios muy bruscos en un momento en el que ellos se encuentran en una etapa crítica, marcados por la presión social de ser el mejor reflejada en las notas», afirma el psiquiatra Francisco Díaz Atienza, coordinador de la Unidad de Salud Mental Infantil del Virgen de las Nieves.Los médicos (tres psiquiatras y cuatro psicólogos) de este servicio, el único que existe en la provincia, atienden a unos 800 menores al año. «El millar de consultas se supera con facilidad y cada vez hay más demanda porque los diagnósticos de autismo o hiperactividad infantil han crecido y los adolescentes reclaman cada vez más este servicio. Estamos saturados», afirma el experto.
Las drogas y los comportamientos rebeldes son los principales trastornos en menores entre 15 y 18 años. «En la unidad –continúa– tenemos niños de 13 años con problemas con el hachís, y eso es preocupante porque los hace más vulnerables».
La demanda va en aumento, pero los recursos, de momento, no han crecido.
Unidad de día y hospitalización
Cuando un menor tiene problemas psicológicos suele atenderlo su médico de cabecera. Si la patología es grave se deriva a salud mental (adultos) y sólo en casos extremadamente complicados llega a la unidad infantil, donde existen cuatro camas de hospitalización y un hospital de día para una veintena de pacientes.
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