El pleno del Ayuntamiento de Granada ha aprobado, con los votos a favor del equipo de gobierno, del PP, y el rechazo de los grupos de la oposición (PSOE, IU y UPyD), los presupuestos municipales para 2012, que ascienden a 262,2 millones de euros de ingresos y 254,1 de gastos, con la supresión gradual de los organismos autónomos como principal novedad para ahorrar en el gasto público y evitar la duplicidad de servicios.

El concejal de Economía, Francisco Ledesma (PP), ha calificado el documento presupuestario de "austero", "prudente" y "valiente", ya que, según ha dicho, refleja la realidad económica actual y presenta medidas para paliar sus efectos con "un aumento" de las políticas sociales —que alcanzan los 21 millones de euros— y la decisión de "no incrementar la presión fiscal a los ciudadanos", ya que se aplicará una subida lineal de todas las tasas e impuestos de un 3,6 por ciento, equivalente a la previsión del IPC.

El edil ha achacado el carácter "restrictivo" del presupuesto a la reducción de ingresos previstos en las transferencias del Estado —que se suma a los 24,3 millones que deberán devolverse por el desfase en el cálculo de 2008 y 2009—; la limitación impuesta por el Gobierno a las entidades locales para endeudarse y la obligación de cumplir el límite de déficit, además del descenso del consumo y de la recaudación en general.

Durante el debate se han rechazado, con los votos del equipo de gobierno popular y la abstención del PSOE, las dos enmiendas a la totalidad del presupuesto presentadas por los grupos municipales de IU y UPyD. Ambos han justificado la iniciativa en "los recortes sociales" que recoge el documento, donde sin embargo se mantienen partidas que consideran superfluas, como las dietas, las aportaciones a la televisión municipal o los gastos protocolarios; además de censurar que el gasto corriente suponga el "80 por ciento" del total de los gastos previstos.

Los portavoces de ambos grupos, Francisco Puentedura y Mayte Olalla, han criticado también la existencia de gastos de "dudoso cobro", que el primero ha cifrado en 55 millones de euros y la segunda en 37 millones. Asimismo, el edil de izquierdas se ha mostrado en desacuerdo con unas cuentas que a su modo de ver no reconocen una deuda municipal de "335 millones de los euros", de los que 173 corresponden a entidades financieras y 162 a empresas y proveedores, según sus cálculos.

Por su parte, Olalla se ha hecho eco de un informe de Intervención que alude a que 2012 puede volverse a entrar en déficit en el Consistorio y ha lamentado que "llevemos" varios ejercicios "gastando más de lo que recaudamos".

El concejal socialista responsable de Economía, Baldomero Oliver, ha justificado su rechazo a estas enmiendas en el deseo del grupo socialista de hacer una oposición constructiva con vistas a ser una "alternativa real" de gobierno, y toda vez que considera que la retirada del mismo no sería operativo ni "beneficioso para la ciudad". ENMIENDAS

Los tres grupos de la oposición municipal (PSOE, IU y UPyD) han criticado duramente que el equipo de gobierno no haya aceptado "ni una" de las más de cien sugerencias presentadas al documento. De hecho, el concejal socialista Baldomero Oliver ha pedido al equipo al gobierno "predisposición al diálogo" recordándole que "no todo lo que venga de fuera tiene que ser malo".

Entre los principales argumentos esgrimidos por los socialistas para rechazar el presupuesto municipal para el próximo ejercicio, Oliver ha dicho que se trata de un documento "continuista" y que deja entrever "la carencia de una política económica concreta" para la ciudad.

En la línea de lo expuesto por IU y UPyD, ha advertido al concejal de Economía de que estos presupuestos "hacen casi imposible alcanzar el equilibrio presupuestario", ya que los ingresos procedentes de las tasas por obras y el Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (I.C.I.O.) son "poco creíbles"

"Harían falta obras por valor de 250 millones de euros en la ciudad para llegar" a las cifras previstas, "muchos viajes a Dubai harían falta para conseguir esa inversión en la ciudad", ha clamado el edil.

Por su parte, el portavoz del grupo municipal socialista, Francisco Cuenca, ha cerrado la intervención de su grupo con una dura crítica en la que ha acusado al equipo de gobierno de plantear "recortes sin paliativos" para tapar "el agujero económico" creado en sus años de gobierno, con "un descenso del 17 por ciento en Bienestar Social y de un millón en Ayuda a Domicilio". Asimismo, ha echado en falta partidas de "futuro" al no haber dinero consignado para el metro ni el AVE.

Mala gestión central

Por su parte, el portavoz del equipo de gobierno local, Juan García Montero, ha defendido la labor realizada para ajustar las cuentas en el actual contexto de crisis económica internacional, la asunción de competencias impropias y "la peor política económica del Gobierno central de la historia", que entre otros asuntos ha incrementado el IVA y con ello, ha dicho, el coste de todas las facturas que tienen que pagar los ayuntamientos.

Así, ha opinado que el equipo de gobierno ha logrado mantener "el bienestar de los ciudadanos" como a su juicio han demostrados estos "en las urnas" en las pasadas elecciones municipales y ha felicitado al concejal de Economía por la labor desarrollada.