Crespo promete trabajar con la "constancia de un martillo pilón" y prioriza Guadalquivir, empleo e infraestructuras

La nueva delegada del Gobierno en Andalucía, María del Carmen Crespo, ha indicado este viernes que trabajará con la constancia de un "martillo pilón" para cumplir las expectativas al frente de una responsabilidad que ha considerado un "reto personal y personal ilusionante e inquietante a un tiempo". Ha avanzado, en esta línea, que, en los primeros meses en el cargo, estará "muy pendiente" de la discusión en torno a las competencias sobre la Cuenca del Guadalquivir al tiempo que ha priorizado la gestión en materia de Costas, las infraestructuras, y, sobre todo, el empleo.

Durante su primera intervención tras su designación, Crespo, quien actualmente es alcaldesa de Adra (Almería) y diputada en el Parlamento andaluz, ha comparecido arropada por su compañeros del PP en Almería y por su líder provincial, Gabriel Amat, y ha trasladado que asume la "compleja" en un contexto "difícil" con una "lealtad más allá de ideologías políticas, sin mirar colores y en defensa de todos los andaluces".

Al tiempo, se ha comprometido a trabajar desde la "humildad" para "arrimar fuerzas en la ardua tarea de crear empleo en España y entrar a paliar la crisis que tanta factura ha pasado en Andalucía". "Se trata de un momento crucial, con una enorme responsabilidad aunque me siento con la fortaleza que da el saber que mis compañeros me van a ayudar", ha subrayado

Crespo, cuyas primeras palabras han sido de agradecimiento al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy y a la vicepresidenta y ministra de Presidencia, Soraya Sáenz de Santamaria, por la confianza depositada en ella, ha adelantado que, en su gestión, será "guía" el discurso de investidura de Rajoy, que ha considerado "una delicia". "Es una guía de trabajo y esperanza para todos los españoles y para mí, por lo que me voy a aprender al dedillo esas palabras para ser un martillo pilón de constancia y trabajo", ha apuntillado.

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