La Junta de Andalucía va a reforzar la atención a menores con trastornos de conducta, fundamentalmente en los ámbitos educativo, sanitario y social, según el protocolo de colaboración que han firmado este jueves los consejeros de Gobernación y Justicia, Educación, Salud y para la Igualdad y Bienestar Social.

El objetivo de este protocolo es ofrecer una respuesta conjunta que garantice el principio del interés superior del menor y poner en marcha acciones coordinadas dirigidas a la prevención, detección temprana, diagnóstico y atención de los problemas graves de conducta. Además, se pretende promover hábitos y conductas saludables, la educación en valores, la recuperación del proyecto vital de las familias y el desarrollo integral del menor en un entorno más solidario, equitativo y no estigmatizante.

Con tal fin, según ha informado la Administración autonómica en una nota, el protocolo prevé el desarrollo de actividades conjuntas que faciliten la racionalización de los recursos existentes para la atención de menores con problemas o trastornos de conductas, la implantación de programas específicos de detección temprana y prevención de estas problemáticas, y favorecer, siempre que sea posible, la permanencia del menor en su entorno habitual.

En el ámbito de la atención social, destacan la labor que realizan los equipos de tratamiento familiar en el abordaje especializado y personalizado de situaciones que pueden provocar disfunciones y repercutir negativamente en el desarrollo de los menores. Asimismo, el programa de mediación familiar permite la resolución de conflictos intergeneracionales y están en funcionamiento otras iniciativas, en colaboración con otras entidades públicas y privadas, para apoyar a las familias que tienen menores en situación de conflicto social.

La Consejería de Gobernación y Justicia, en las competencias que le corresponden en la ejecución de las medidas previstas en la Ley Orgánica de Responsabilidad Penal del Menor, dispone en Andalucía de los equipos profesionales cualificados para la intervención con menores con trastorno de conducta tanto en Centros de Internamiento como con las medidas no privativas de libertad. Con este protocolo se escenifica la continuidad y consolidación de esta intervención especializada más allá de la medida judicial

Además, en Andalucía hay 13 centros específicos dentro del Sistema de Protección, con un total de 152 plazas, para la atención directa de menores que tienen trastornos de conducta u otros problemas. Asimismo, la Consejería para la Igualdad y Bienestar Social dispone de 143 equipos de tratamiento familiar, con 546 profesionales —entre personal psicólogo, de trabajo social y de educación sociofamiliar— que trabajan en la prevención de situaciones de riesgo.