El presidente del Banco Santander, Emilio Botín, ha asegurado que crear un 'banco malo' que aglutine los activos tóxicos del sistema financiero español no es la solución al problema, porque no reactivará la concesión de crédito para familias y empresas, y cargará con los costes de la reestructuración de la banca a los españoles.

"El 'banco malo' no me gusta, creo que no es la solución. Sería hacer una cosa que le va a costar dinero al contribuyente y no solucionar que se den los créditos", sostuvo el presidente del primer banco español, al tiempo que expresó su convencimiento de que el futuro Gobierno que presidirá Mariano Rajoy "lo hará muy bien".

"Hay que ir por otro camino, hay que terminar la reestructuración y dejar el banco malo", enfatizó Botín, partidario de que el Banco de España intervenga las entidades inviables con problemas graves de solvencia y las devuelva al sector privado a través de procesos competitivos de subasta, como el llevado a cabo con la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM).

La visión de Botín coincide con la expresada ayer por el secretario general de la Asociación Española de Banca (AEB), Pedro Pablo Villasante, quien considera que la creación de un 'banco malo' que aglutine los activos problemáticos del sector no deja de ser un "esquema de ayuda", por lo que se mostró a favor de condicionar esta iniciativa a que la entidad beneficiada se reestructure y sea absorbida por otras que faciliten su viabilidad.

Al término de la inauguración del nuevo centro de proceso de datos de la entidad en Cantabria, el presidente del Santander explicó que el banco estudiará todos los procesos de venta de entidades intervenidas, tal y como ha hecho con la caja alicantina finalmente adjudicada al Banco Sabadell por el precio simbólico de un euro y tras recibir ayudas de 5.200 millones de euros sin coste para el Estado.

El próximo presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy, ha expresado recientemente su intención de avanzar en el saneamiento del sistema financiero y ha apuntado a que continuará el proceso de consolidación entre entidades, y aunque aún no se ha referido expresamente a la creación de un 'banco malo', podría estar planteándose su creación, según fuentes próximas al PP.

No está previsto que Rajoy desvele sus planes concretos para avanzar en la reestructuración del sistema financiero antes de su toma de posesión el 19 de diciembre, pero el portavoz económico del PP, Cristóbal Montoro, ha apostado por 'fórmulas intermedias' para sanear el sector y ha apuntado a que el Estado tendrá que asumir una parte de responsabilidad en el proceso de reestructuración.

Exigencias de capital.

Sobre la evolución del Santander, Botín indicó que el banco va a actuar en tres frentes, en la venta de activos no prioritarios, como las desinversiones recientemente acometidas en Colombia y Chile, en dar una solución a los clientes de participaciones preferentes del banco y en la consecución de los objetivos de solvencia marcados por las autoridades europeas.

En este último punto, Botín avanzó que el Santander logrará un capital de máxima calidad 'Tier 1' del 9% a finales del presente mes de diciembre, lo que supone un semestre antes del calendario exigido por la Autoridad Bancaria Europea (EBA por sus siglas en inglés). Así, Santander elevará dicho capital al 10% en junio.