Uno de los dos jóvenes detenidos este miércoles como presuntos autores de una falsa amenaza de bomba en la Estación de Autobuses pasará este jueves a disposición judicial, según han informado a Europa Press fuentes de la Policía Nacional, mientras que el otro quedó en libertad en la pasada jornada tras prestar declaración en comisaría.

A las 9.18 horas de este miércoles se recibió una llamada en el servicio de emergencias de 091 de la Comisaría Provincial de Lugo procedente de la consigna de la Estación de Autobuses luguesa, en la que el interlocutor comunicaba que habían depositado dos mochilas, manifestando que se trataba de un "artefacto explosivo y que detonará en tres horas".

Por ello, se activó el protocolo establecido por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para este tipo de incidentes, consistente en el desalojo y acordonamiento de la zona afectada, donde se creó un perímetro de seguridad, en el que ha colaborado la Policía Local para regular el tráfico.

Además, se desplegaron unidades especiales, Guías Caninos y Técnicos en Desactivación de Explosivos, (Tedax), solicitados a la Jefatura Superior de Policía De Galicia.

A la llegada de unidades especiales, los agentes realizaron una inspección, por parte de Guías Caninos, en la consigna, centrándose en las mochilas sospechosas. Posteriormente, los Tedax procedieron a comprobar las mismas con resultado negativo, ya que no existían explosivos en su interior, y se trataba de dos bolsas de basura negras con ropa. DETENCIÓN

Con los primeros datos obtenidos en el lugar y entorno de los hechos, la Policía consiguió una descripción pormenorizada de los presuntos autores de la falsa amenaza, que permitió identificar y detener a estos individuos sobre las 11.20 horas de este miércoles.

Por todo ello, a las 11.30 horas finalizó el dispositivo desplegado, se restableció la normalidad en la zona de la Estación de Autobuses, cuyas instalaciones permanecieron desalojadas durante unas dos horas después de que dos jóvenes dejaran las bolsas de plástico en la consigna y advirtieran a los empleados de que eran artefactos que iban a estallar.