El consejero de Universidades, Empresa e Investigación, José Ballesta, y el alcalde de Torre Pacheco, Daniel García Madrid, inauguraron este sábado el XXVII Salón de la Automoción e Industrias Afines, el mayor escaparate del sector y un punto de referencia para los aficionados del mundo del motor.

Durante el fin de semana, el municipio de Torre Pacheco se convertirá en el epicentro del sector automovilístico de la Región de Murcia, según han informado fuentes del Gobierno regional en un comunicado.

Así, en un espacio expositivo de más de 22.000 metros cuadrados, medio centenar de empresas relacionadas con el sector presentarán las últimas novedades del mundo del motor, desde deportivos de lujo hasta coches de ocasión, pasando por vehículos industriales.

El consejero José Ballesta indicó que "la Comunidad promueve y apoya este tipo de iniciativas, que contribuyen a impulsar los sectores productivos y a crear el entorno perfecto para que las empresas puedan captar clientes potenciales que acuden con una clara intención de compra".

Además de los concesionarios y otras compañías del sector, participan en esta feria empresas pertenecientes a la industria auxiliar, a través de stands dedicados a maquinaria y herramientas para talleres, recambios, sistemas de 'parking', e incluso talleres que fabrican coches a medida.

En este sentido, Ballesta señaló que esta muestra "se ha convertido en el acontecimiento más importante de la Región en el sector automovilístico", gracias a "su calidad y a la variedad de vehículos que en él se exponen". Asimismo, el consejero incidió en que "este salón permite a las empresas tomar el pulso de la sociedad, para ofrecer un servicio más acorde a las necesidades del sector".

Y es que, esta nueva edición cuenta con una serie de actividades paralelas, como el 'Salón del Regalo', donde una veintena de empresas ofrecen artículos navideños, o una zona de actividades lúdicas para los niños.

Entre las actividades para los más pequeños destaca la pista de educación vial, en la que podrán demostrar su conocimiento en cuanto a normas de seguridad vial, el comportamiento en las calles como peatones e incluso como conductores. Se trata de una clase práctica por medio de karts eléctricos, donde los niños se sienten conductores y peatones por un día.