Con sabor amargo
Eva contro Eva es su sexto y último trabajo, después de tres años desde el anterior. Diez temas que nos hablan de las pequeñas y grandes tragedias humanas: la tración, los miedos y las represiones impuestas por la fe católica, la frustación, la ambición, la opresión, el abandono, las esperanzas truncadas.
Unas letras que parten de la ambigüedad entre el frágil aspecto de la cantante y su fuerza e intensidad sobre el escenario.
De entre todas las canciones, una especialmente personal, para la que ha contado con la colaboración de Angelique Kidjo, Madre Terra, un tributo a África, donde la artista siciliana trabajó como directora artística del proyecto Italia África.
La de Carmen Consoli es una carrera en alza. Llama la atención de público y crítica en el Festival de San Remo, en 1996. Pero su primer gran éxito le llega un año después, con un disco de platino por Confusa e felice.
En 2003 se alzaría con el premio a la mejor artista femenina del año de los Italian Music Awards.
Ayer inició en Madrid la gira que le llevará por toda Europa en autobús: desde Palermo hasta Londres.
* Sala Bikini. Déu i Mata, 105. El sábado, a las 21 horas. Entrada: 15 euros.
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