CCOO lamenta que los presupuestos del SMS para 2012 se centren en deuda pública y recorte a los trabajadores públicos

La Federación de Sanidad de CCOO de la Región de Murcia (FSS-RM) considera que los presupuestos de 2012 para el Servicio Murciano de Salud (SMS) centran nuevamente la reducción de la deuda pública en recortes a los trabajadores públicos.

La Federación de Sanidad de CCOO de la Región de Murcia (FSS-RM) considera que los presupuestos de 2012 para el Servicio Murciano de Salud (SMS) centran nuevamente la reducción de la deuda pública en recortes a los trabajadores públicos.

Comisiones Obreras (CCOO) denuncia que el "peso del ajuste económico" en la Consejería de Sanidad "pase por un único punto, disminuir el número de puestos de trabajo y las prestaciones de los que mantengan el empleo".

Afirman que es "disminuir empleos y salarios, porque lo denominen como lo denominen no renovar contratos es sinónimo de despedir" cuyo "resultado es más personal sanitario desempleado y más familias sin sustento. Por otro lado, "aumentar el horario de trabajo de 36 horas y media a 37 horas y media es pagar lo mismo por más trabajo y por tanto, disminuir el salario".

La FSS-RM considera que una parte de la población "no ve con malos ojos centrar los recortes en los trabajadores públicos". Explican que estos ciudadanos se basan "primero en que son los que mantienen el trabajo en un país con cinco millones de parados y segundo, por una leyenda urbana muy extendida que cataloga a todos los funcionarios como vagos e incumplidores".

Afirman que "a los diferentes Ejecutivos les convienen ambos argumentos y así, es mucho más sencillo y popular agraviar a los empleados públicos antes que otras alternativas".

Señalan que estas medidas tienen consecuencias porque "detrás de cada empleado público hay una familia y las mismas cargas familiares que los trabajadores del ámbito privado, y además los funcionarios son únicamente el 10 por ciento de la población y por supuesto, no son quienes han provocado esta crisis".

CCOO se muestra dispuesta a "negociar propuestas de control del gasto y reformas tanto estructurales como laborales", afirmando a su vez que "los trabajadores de la Sanidad pública asumen la realidad de la economía autonómica pero también exigen que los sacrificios se repartan entre todos los ciudadanos y sobretodo que no les engañen con la terminología de despedir y recortar", han concluido.

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