El director comercial de Koipesol Semillas, Gonzalo Velasco, ha advertido este jueves de que España perderá más de 600 millones de euros anuales solo en pagos directos de salir adelante las propuestas legislativas de reforma de la PAC, lo que, en su opinión, supone "un claro retroceso en la búsqueda de explotaciones viables, competitivas y orientadas al mercado".

Esta es una de las ideas que ha expuesto Velasco en las II Jornadas sobre las nuevas tendencias en el cultivo de girasol que se han celebrado hoy ante un nutrido grupo de agricultores en el Museo del Carruaje en Sevilla.

En su intervención ha hecho un repaso por la reforma de la PAC, que, en su opinión, recoge "propuestas tremendamente negativas, ya que estrangulan al profesional agrario, cargándole de burocracia, incrementando sus costes, exigiéndole prácticas que no deben cumplir sus competidores internacionales, limitándole su capacidad productiva y reduciendo sus ingresos agrarios y, por tanto, sus rentas".

Ha explicado que "la propuesta confirma el recorte importantísimo de los Fondos destinados a la Agricultura, que ya se avanzó en las Propuestas sobre el Presupuesto de la UE 2014-2020, en donde el sector agrario, cuya renta apenas alcanza el 50 por ciento de la media de la renta comunitaria, verá recortada su ficha financiera en más de un once por ciento".

En su opinión, "el establecimiento de una tasa plana para los pagos directos, sin reconocer la diversidad de cultivos, zonas de producción y métodos de producción pone en serio peligro la viabilidad de muchas explotaciones, precisamente las más eficientes, con altos rendimientos, pero también con importantes costes productivos".

Esta situación se verá agravada de prosperar las propuestas que dejan abierta la determinación del número de hectáreas elegibles para la percepción de dichos pagos, en donde la Comisión sólo fija como referencia el año 2014, sin ningún otro criterio que pueda limitar la cantidad total de hectáreas que podrían percibir pagos de la PAC. De esta manera España, que actualmente tiene un número de hectáreas con derechos asignados por poco más de 15 millones, podría ver incrementada sustancialmente su superficie, lo que provocaría una reducción del valor unitario de los pagos básicos.

Añadió, que "el agricultor y ganadero europeo es el profesional agrario que más controles y requisitos en materia medioambiental y de bienestar animal debe superar de todo el planeta". En este sentido, ha apuntado que "nuestra legislación en esta materia es, sin lugar a dudas, la más avanzada del mundo".

"No tiene ningún sentido subordinar una parte fundamental de los pagos directos al cumplimiento de condiciones adicionales a favor del clima y del medioambiente. El cumplimiento de estos requisitos, que suponen costes adicionales de producción y la consiguiente pérdida de competitividad, solo puede contemplarse en el ámbito de medidas voluntarias y debidamente compensadas, nunca como medida obligatoria y punitiva, como quiere establecer el comisario europeo de Agricultura", ha subrayado.