La Federación de Servicios Públicos (FSP) de UGT Extremadura propone al Gobierno de Extremadura que en las oposiciones que convoque establezca un "temario oficial" para cada categoría y especialidad, así como criterios de corrección "más justos y objetivos".

En nota de prensa, la FSP-UGT considera que "la falta de un temario oficial dificulta la superación de las pruebas y crea un desánimo entre los opositores".

Explica que en las pruebas realizadas este pasado fin de semana, de la categoría camarero limpiador, de las 17.199 personas admitidas sólo se han presentado 8.856 al primer ejercicio, lo que supone un 49,80 por ciento, mientras que al segundo ejercicio se presentan 3.853 opositores un 22,40 por ciento.

Se trata de "uno de los porcentajes más bajos que se han producido en esta clase de pruebas", explica el sindicato.

En la categoría de Peón Especializado lucha contra incendios, la FSP-UGT apunta que de los 1.098 opositores presentados, sólo 40 han superado el primer ejercicio, algo que se ha convertido en "la tónica en la mayoría de los exámenes realizados".

Reflexión sobre el procedimiento

Ante esta situación, el sindicato considera que la Junta de Extremadura "debería reflexionar si este es el procedimiento correcto" para, según ellos, "elegir a los mejores".

El sindicato asegura que en las oposiciones del Gobierno regional, se están confeccionando pruebas con un "alto y desproporcionado nivel", según la titulación requerida, y que se evalúa a los opositores "mediante preguntas que no tienen conexión alguna con las tareas que se desempeñan en los centros de trabajo".

Lamenta además que los exámenes se confeccionan mediante un temario "indeterminado y disperso", en el que "la concreción y contextualización" es "imposible", lo que "crea indefensión e impotencia al opositor frente a las múltiples y variadas preguntas".

FSP-UGT añade además que la situación "empeora notablemente" con la "agresiva corrección" que se hace del examen, y que consiste en que cada dos preguntas contestadas erróneamente restará una pregunta contestada correctamente y seis preguntas en blanco restan una buena.

"Esto está produciendo que en la mayoría de las categorías en el examen tipo test, prácticamente, se queden con un número de opositores iguales a las plazas ofertadas", lo que provoca que no queden listas de espera o que éstas sean insuficientes, lo que provoca que "la administración tenga que hacer de nuevo procesos para constituir listas de espera para sustituciones, con el consiguiente coste económico que ello supone".