El presidente de la Autoridad Portuaria de Gijón, Emilio Menéndez, ha confiado este jueves en que en 2012 los tráficos de Ence Navia ya puedan estar conectados con en El Musel. De esta forma, ha desmentido las acusaciones del PSOE gijonés sobre que el Principado había roto el convenio con la papelera.

Menéndez, tras recibir en el puerto al camión número 20.000 que utiliza la Autopista del Mar y que desembarcó procedente de Nantes, ha apuntado que la papelera de Ence Navia sigue desarrollando su actividad y ha añadido que están a punto de terminarse las infraestructuras de FEVE de conexión con la papelera naviega.

Ha señalado que la partida prevista por la Autoridad Portuaria de acondicionamiento de la línea férrea hasta la terminal que va a construir Ence en El Musel -que ya está contratada— se tiene que retrasar al próximo ejercicio, por lo que es en 2012 cuando se espera que empiece a funcionar.

Unido a ello, ha apostado por diversificar los tráficos y, dentro de esta apuesta, ha señalado que se está trabajando en la puesta en marcha de una línea ferry entre El Musel e Irlanda, que podría ser gestionada por LDLines, la misma naviera de la Autopista del Mar con Nantes.

Menéndez ha destacado que la traída de pescado de Irlanda es muy importante y ha añadido que en el Algarbe (Portugal) y el Sur de España hay 20.000 hogares de irlandeses, por lo que se podría generar un tráfico de turismo importante.

A este respecto, ha augurado que no se tardará mucho en lograr una línea con Irlanda, mientras que en el caso de Inglaterra, ha señalado que hace falta realizar inversiones por un montante de unos seis millones de libras.

También ha adelantado que el buque de la Autopista del Mar tiene registra una ocupación media del 90 por ciento, por lo que es posible que a principios del año que viene pudiera ponerse en funcionamiento el segundo barco para aumentar las frecuencias de tres a cinco escalas semanales, mientras que ha sugerido aprovechar el fin de semana para unir Gijón con el sur de Irlanda. Ha precisado, no obstante, que la naviera será quien tenga que hacer sus cálculos.

El presidente portuario ha destacado que Gijón está bien posicionada en el Arco Atlántico y que El Musel cuenta con un calado de más de 20 metros, lo que le permite competir con Bilbao o La Coruña. También tendrían cabida barcos más grandes que pudieran proceder del Canal de Panamá tras la ampliación a la que está siendo sometido.

Defensa de la zalia

En otro orden de cosas, ha defendido la importancia de la Zona de Actividades Logísticas e Industriales de Asturias (Zalia), en contra de lo expresado por su homólogo avilesino. Según él, el puerto de Avilés se siente defraudado en las expectativas que tenía de tener una zona de actividad logística, aunque ha incidido en que eso no va a perjudicar la Zalia en las infraestructuras que hay que realizar.

Preguntado por la UTE Dique Torres, ha indicado que se le dio liquidación provisional que era un saldo de unos seis millones de euros y ha esperado que la UTE siga sus actuaciones durante el plazo de garantía, para que, hacia febrero o marzo, se liquide definitivamente el contrato. Será entonces cuando se le pueda devolver la garantía y se pueda dar el contrato por extinguido.

"No tenemos ningún problema con la UTE Dique Torres", ha asegurado el presidente de la Autoridad Portuaria. Según él, se le ha abonado la obra ejecutada, por lo que confía en que la UTE esté conforme con ello.

Por otro lado, Menéndez recibió en el puerto al transportista José Manuel Méndez Pombo, que conducía el camión 20.000 que usa el trayecto de conexión con Nantes y al que hicieron entrega de un obsequio. En el acto ha estado presente también el representante de la naviera en España que explota la línea, Carlo Tamagni, el capitán del buque, Graham Starkey, y el director de El Musel, Julio de la Cueva.

En los diez primeros meses del año, la Autopista del Mar ha alcanzado tráficos de 520.272 toneladas de mercancía rodada, 34.000 vehículos y 53.000 usuarios.

El buque Norman Voyager, operado por la naviera LD Lines, llevaba en el interior de sus bodegas -a carga prácticamente completa-, el camión propiedad de la firma Financiera Maderera (FINSA), que habitualmente hace este viaje para acortar el tiempo de carretera necesario para desplazarse a Centroeuropa.

El camión permaneció trincado en las bodegas del buque, mientras su conductor pudo descansar toda la noche, evitando el tránsito por carretera y permitiéndole llegar a puerto descansado y con el tacógrafo a cero.