Tengo una pareja que es peluquera y me dice que si se liman algunas partes del cuerpo como pezones y glande se siente más ¿es esto verdad? ¿Es peligroso? Antoniogrande

Lijar suavemente ciertas zonas del cuerpo para hacerlas más sensibles al roce, es lo que se llama abrasión, se suele realizar con limas de uñas, cepillos de dientes o lijas de madera suaves. En general las abrasiones producidas por estos objetos son menos graves que las que se producen en la piel por el roce de una alfombra. Los pezones se vuelven más sensibles lijándolos ligeramente con una lima y para obtener el mismo efecto en el glande se suele raspar con una uña o con un pincel para óleo de pelo de marta. Este tipo de caricia aumenta la intensidad de las sensaciones. Pero si vais a emplear este tipo de práctica no se debes elegir zonas que estén sometidas posteriormente a roce o a presión. Los objetos que se usen para realizarla deben de estar escrupulosamente limpios y no llegar a producir sangre en ningún caso.

He leído varias veces la palabra bondage referido a una práctica sexual. ¿En qué consiste? Labrador cansado.

De estas, ahora llamadas parafilias, las más frecuente son las relaciones sadomasoquistas, que por su variedad y por las posibilidades de expresar las fantasías. En su versión light y cuando se recurre a atamientos se llama bondage. Los beneficios que se sacan del bondage varían según la personalidad de cada uno, algunos piensan que sentirse atados favorece las descargas de adrenalina en el cerebro, aumenta la tensión sexual y libera ondas alfa que son las que se emiten en estado hipnótico. Otros prefieren estrechar o tirar de las ligaduras para favorecer el flujo de adrenalina y euforia. Los hombres que son mucho más fuertes que sus compañeras y que sin embargo desean un intercambio más equilibrado prefieren un bondage parcial que los haga sentir casi indefensos en manos de sus amantes. Otros aumentan su autoestima descubriendo que a pesar de las ligaduras son capaces de dominar por la palabra o de otro modo. Muchos sienten que las ataduras les liberan de tener que cumplir sexualmente, o de tener que ser activos, esto les permite relajarse y disfrutar de las sensaciones que su pareja está provocando en ellos. Siempre que uses algún tipo de práctica que haga que tu pareja o tú permanezcáis indefensos, pactad previamente la palabra mágica que sirva para terminar con el juego, no valen palabras de terror o para dar pena porque estas forman parte de él.

 ¿Es verdad que los gays tienen un sentido del arte mayor que los heterosexuales? La luna en cáncer.

No, pero los gays tienen más facilidades para expresar su tendencia en determinados colectivos como peluqueros, modistos, decoradores etc. y esto hace creer a las personas que son más artistas, pero por genética no lo son más que los heterosexuales.

Tengo un amigo que me ha dicho que hagamos la 'postura del cuervo'. Dime que es que quiero darle una sorpresa. Buscadora de ideas.

Según Kama Sutra, “cuando ambos chupan los genitales del otro al mismo tiempo, con la cabeza de cada uno hacia los pies del otro se llama la postura del Cuervo”, Buscadora. Esta descripción del sexo oral simultáneo es, en realidad, el conocido 69. Aunque teóricamente parece que el goce va a ser mayor, en la práctica resulta incómodo y menos satisfactorio que hacerlo por turnos, cada uno puede disfrutar con la visión del placer del otro y llevarle al orgasmo según desee concentrándose en las sensaciones placenteras sin tener que preocuparse de otras cosas. No obstante cuando el 69 funciona, algo mágico ocurre: los cuerpos se funden, las sensaciones fluyen como en un circuito eléctrico, un mágico circulo en el que é te hará lo que tu le hagas y viceversa, y en el que vuestra excitación irá creciendo al mismo tiempo. Y si llegáis al mismo tiempo ¡Estupendo!

Mi novia dice que la acupresión es buena para las relaciones sexuales ¿En qué consiste? Margareto.

La acupresión es el arte de estimular los centros de curación o de placer del cuerpo presionando sobre zonas especiales. Su empleo es muy corriente en la India para la curación, no solo se presionan los músculos para relajarlos sino también para equilibrar el flujo energético y para drenar el sistema linfático. El sexo solo es una pequeña parcela de este complicado sistema de curación. Las zonas más adecuadas para practicar la acupresión son las manos, los pies y las orejas. Veinte minutos de acupresión aplicada en estos lugares puede duplicar la energía sexual. Se presta atención por separado a cada centímetro de piel de las manos y de los pies y a cada punto del lóbulo y el pabellón de la oreja por medio de una presión firme y un movimiento circular. No se debe en ningún caso producir dolor. Dentro del pie es especialmente sensible el dedo gordo, y en la oreja el lóbulo, cuya conveniente estimulación, por medio de la succión, puede provocar un orgasmo con toda facilidad. Existen otros puntos de presión en el cuerpo, como son los pezones, la parte profunda de la clavícula, el centro del esternón, justo debajo del ombligo, en el límite superior central del vello púbico, el la base de la columna vertebral y en el periné cerca del ano. Para mayor información se recomienda el libro de David y Ellen Ramsdale “Ecstasy and Sexual Energy”. Dentro de las relaciones de pareja jugar a la acupresión puede ser divertido pero sin darle demasiada importancia.