Silván reconoce que la muerte de un brigadista forestal por un "atentado" le ha marcado "el resto" de su vida

El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Antonio Silván, reconoce, en un escrito en el que reflexiona sobre los incendios, que la muerte del joven brigadista Aitor Lastra, de 25 años, por lo que califica de "atentado" le ha marcado "el resto" de su vida.
Antonio Silván Rodríguez
Antonio Silván Rodríguez
EUROPA PRESS
Antonio Silván Rodríguez

El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Antonio Silván, reconoce, en un escrito en el que reflexiona sobre los incendios, que la muerte del joven brigadista Aitor Lastra, de 25 años, por lo que califica de "atentado" le ha marcado "el resto" de su vida.

Silván se ha expresado así en un escrito titulado 'La lluvia no apagará nuestro aliento', en el que califica de "satisfactorio" el año forestal para la protección del entorno y el para el mantenimiento de la masa arbolada, pero cree que "ha sido terrible en lo personal".

"La muerte de Aitor, "un joven fuerte y valiente, preparado en lo suyo, con vocación de protegernos frente al fuego y que lo hiciera mientras atacaba uno de los incendios intencionados marcará el resto de mi vida", afirma Silván, quien asegura que piensa en su familia, sus amigos y sus compañeros, a los que les falta ya "parte de la suya".

En este sentido, afirma que con Aitor y todos ellos se tiene, "cuando menos, una deuda de gratitud" y añade que ha sido una "terrible muerte" ocasionada por un atentado que espera que marque también a su responsable "por el resto de sus días" y, si puede explicarlo ante la Justicia, "aún mejor".

El titular de Fomento y Medio Ambiente inicia su escrito agradeciendo las lluvias de las últimas semanas y un bien "tan preciado como escaso" que cree que quizá no habría valorado bien. "No exagero si digo que ha tenido en mí y creo que también en las personas que me rodean un efecto de catarsis", asegura el consejero.

Trabajo continuado

Antonio Silván recuerda que se ha dado por concluida la fase más alta de alerta de incendios forestales y recuerda que el lunes se presentará su balance, pero añade que la campaña de incendios "no ha terminado" porque en los próximos meses seguirán trabajando, acomodando plantillas y recursos y buscando "las mayores cotas de efectividad y eficacia en la protección forestal".

El consejero recuerda que le han preguntado "con insistencia" a lo largo del verano cómo iba el operativo y se justifica al explicar que no es que no quisiera responder, sino que hay que entender que su desarrollo nunca ha dependido exclusivamente de ellos y tampoco la evolución de las hectáreas calcinadas.

"Hubiera sido atrevido. Hoy comprendo que habría sido insensato", dice el consejero, al tiempo que recuerda que sólo el siete por ciento de los incendios tiene una causa natural o, dicho de otra forma, más del 90 por ciento están ocasionados por la acción del hombre.

"Pero cuando además interviene la intencionalidad, la maldad de quienes disfrutan con la destrucción y el terror, la extraordinaria labor de nuestros excelentes agentes contra incendios, de nuestros mejores medios, se queda siempre, siempre, muy escasa porque, insisto, el desarrollo de los incendios, del fuego y de quienes disfrutan con el mal es impredecible", afirma.

Debate sobre lo ocurrido

En referencia al balance de incendios, afirma que le gustaría que el análisis "no quedara sólo en una exposición estadística de hectáreas de matorral o arbolado", ni si se mejoran los resultados respecto a otras campañas, o si es una u otra la provincia más o menos afectada.

"Me gustaría abrir un debate sobre cómo algunos municipios de la Comunidad, con medias de 300 habitantes, han sufrido en los últimos cuatro meses casi un centenar de incendios", dice Silván, quien cree que para él es "inexplicable".

Estos datos, estas reflexiones, dice, se harán en el Centro para la Defensa del Fuego, referencia para la formación, preparación e investigación del personal en materia de incendios, y por eso quiere que ese balance fuese ante todo un reconocimiento a la abnegada labor -nunca lo suficientemente recompensada- "de todo el personal que participa en la extinción de incendios, de quienes protegen, en muchos casos con su vida, nuestros montes".

"No creo que haya un mejor ejemplo de colaboración que la que existe en la extinción de incendios, la cooperación, el entendimiento, la coordinación sin fisuras de las distintas administraciones", añade el consejero, quien recuerda la necesidad de la colaboración ciudadana, la concienciación de que los incendios son "un problema de todos" y una "lucha de todos", "colectiva".

"De las administraciones y de los ciudadanos que no tienen miedo frente a las llamas y que deben perder el miedo a hacer frente a aquellos que de forma intencionada queman el monte y que de forma quizás no intencionada pero sí responsable provocan, desgraciadamente, la muerte", afirma.

Antonio Silván insiste en que la campaña de incendios no ha terminado, que se seguirá trabajando. "Y les digo una cosa: no cejaremos en nuestro objetivo de combatir el fuego en cualquiera de sus frentes. También les advierto de que la lluvia, por mucho que nos alivie, no apagará nunca nuestro aliento", concluye.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento