Calma tensa en las ‘casas murcianas’

Vecinos y las familias de okupas del Gorg reclaman soluciones.
Una familia que vive en las casas murcianas «desde hace ocho meses», ayer, a la espera de una solución al conflicto.
Una familia que vive en las casas murcianas «desde hace ocho meses», ayer, a la espera de una solución al conflicto.
Jordi Soteras
Una familia que vive en las casas murcianas «desde hace ocho meses», ayer, a la espera de una solución al conflicto.
Los ocupantes de las casas murcianas del barrio del Gorg de Badalona continuaban ayer en las viviendas, dos días después de finalizar el plazo del decreto mediante el cual el consistorio les otorgaba 48 horas para irse.«El Ajuntament no hará nada a no ser que haya una orden judicial de desalojo», comentaban los vecinos. «La única solución por ahora es continuar apretando en la Plataforma». Y es que los vecinos del barrio, que viven esta situación desde octubre, se han agrupado en una plataforma, que cada jueves se manifiesta para denunciar «los robos y la delincuencia» que tienen lugar en esta zona del Gorg.

El presidente de la Asociación de Vecinos, Guzmán Roger, explica que sienten «miedo» y que los okupas «les han amenazado».  «Cuando los propietarios e inquilinos de las viviendas se trasladaron a los pisos que les facilitaron por las obras del puerto, los okupas aprovecharon el momento y entraron en las casas. Además, sabemos que no todos, pero algunos tienen las suyas, que han alquilado mientras están aquí», afirma.

Por su parte, los okupas aseguran que necesitan «una vivienda digna» y que no se irán hasta que se las faciliten. La alcaldesa, Maite Arqué, sostuvo ayer en un programa de televisión que los ocupantes «no obtendrán nada del Gobierno».

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