Una patera con 21 inmigrantes de origen subsahariano a bordo ha conseguido alcanzar aguas de Melilla procedente de las cercanas playas de Marruecos, según han informado a Europa Press fuentes policiales. La embarcación en la que iba este grupo numeroso, entre los cuales hay siete menores de edad y dos mujeres, era tipo neumática e impulsada a motor.

Así, según ha añadido las citadas fuentes, al ver la presencia de las fuerzas de seguridad, los subsaharianos se dirigieron hasta la zona del Club Marítimo de Melilla, donde fueron interceptados por la Guardia Civil, en concreto por los efectivos del Grupo de Especialistas en Actividades Acuáticas (GEAS).

A los sin papeles, que han llegado en buen estado, se les ha abierto un expediente de expulsión por parte del Cuerpo Nacional de Policía que establece su repatriación, pero mientras se realiza este trámite documental, han sido ingresados en el Centro de Estancia Temporal de inmigrantes (CETI).

En esta instalación, dependiente del Ministerio de Trabajo (en concreto del Imserso), podrían pasar meses e incluso es muy posible que logren su ansiado traslado a la Península si las autoridades no son capaces de concluir el expediente de expulsión, dadas las dificultades que se producen para ejecutar las repatriaciones debido a que sus países de origen no les reconocen como nacionales suyos.

Por ello el CETI, con las entradas que se han produciendo en estos últimos meses y a la espera de la repatriación de todos aquellos que han entrado ilegalmente, se encuentra muy por encima de su capacidad, con más de 850 acogidos cuando su capacidad óptima es de 480.