La Federación de Asociaciones Defensa Sanidad Pública ha exigido este viernes al Gobierno valenciano un cambio de política y de responsables sanitarios tras el anuncio de cierre de 262 camas hospitalarias en la Comunitat y ha criticado que, "a pesar de los discursos" del presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, de que no iban a llevarse a cabo recortes en este área, sí que "se están produciendo".

Por ello, ACDESA/FADSP ha reclamado en un comunicado un cambio de política que se dirija a "rentabilizar las inversiones públicas" de manera que se "mejore" y "racionalice" la utilización de la sanidad pública, se acabe "con la política privatizadora" y se mejore la utilización de los recursos tecnológicos.

En este sentido, ha recalcado que la medida del cierre de camas es una prueba de los recortes, que se suma a otros como la situación por la que atraviesa el Centro de Investigación Príncipe Felipe de Valencia o la "amortización de plazas, no sustituciones en vacaciones, camas cerradas y ausencia de médico en las ambulancias de emergencia".

Según estas asociaciones, "a pesar de que de que el número de camas no es el indicador más relevante para medir la solidez de un sistema de salud, hay que tener en cuenta que la Comunitat Valenciana es la segunda autonomía que tiene menos camas por 1.000 habitantes en España, que a su vez es el país de la Unión Europea que tienen menos camas por 1.000 habitantes".

"En estas circunstancias, no se justifica una disminución del número de camas que, sobre todo, va a presionar sobre las listas de espera, la calidad de la atención sanitaria y posiblemente una derivación de pacientes de los departamentos donde se han cerrado camas —todos ellos de gestión pública de la Agencia Valenciana de Salud— hacia los departamentos vecinos, gestionados por las concesiones administrativas —gestión privada— con el consiguiente flujo de dinero hacia ellos", han apuntado.

Asimismo, han criticado la "tradicional infrapresupuestación" de la sanidad en la Comunitat y han asegurado que el origen de la "importante deuda" con los proveedores es la "mala gestión y planificación sanitaria de los últimos años con la agresiva política de privatización de la sanidad y que lejos de una mayor contención del gasto, lo incrementa", mientras "se destinan fondos a gastos suntuarios", entre los que cita "aeropuertos sin aviones, circuitos de Fórmula 1, parques temáticos en quiebra constante, cajas de ahorro con déficit milmillonarios, etc".

Para estas entidades, "antes de recortar prestaciones y derechos sanitarios a los ciudadanos valencianos, hay medidas que se pueden tomar" y pone como ejemplo la reposición de los impuestos de patrimonio y sucesiones o la priorización del gasto público. En el ámbito sanitario, aboga por "la eliminación de cargos de asesores, que, a pesar de la reestructuración llevada a cabo en la Conselleria, se han mantenido, hasta una mayor implicación de los profesionales en las indicaciones de pruebas y prescripción farmacéutica, donde aún sigue habiendo un margen importante de mejora".