La confianza de los empresarios cántabros en el tercer trimestre de 2011 registra una caída de casi nueve puntos respecto al valor observado en julio para alcanzar la cifra de -11,4, según el Indicador de Confianza Empresarial (ICE), elaborado por la Cámara de Comercio de Cantabria.

A nivel nacional, el descenso del indicador es de magnitud similar al experimentado en la región, ya que se reduce desde -9,2 registrado en julio al -18,4 en octubre. El ICE, tanto nacional como regional, abandona la senda de recuperación iniciada a principios de año para situarse en valores observados durante 2010.

Según el informe de la Cámara de Cantabria, la confianza de los empresarios cae tras dos trimestres consecutivos de mejoras y, con esta caída, se trunca la recuperación iniciada hace dos trimestres. Los acontecimientos del último trimestre y la amenaza de un nuevo estancamiento económico están detrás de este valor del indicador, según informa la Cámara en un comunicado de prensa.

La cifra de negocio y el empleo, con saldos inferiores que en la anterior oleada, han sido los componentes del ICE que más han repercutido en el deterioro del indicador. La variable inversión, aunque es la única que presenta saldo positivo en el tercer trimestre, fue el componente que menos influencia ha ejercido en la caída de la confianza empresarial.

Por segundo trimestre consecutivo desde que la confianza empresarial se mueve en valores negativos, el factor "otras causas", con un porcentaje de respuesta del 53,6%, lidera el ranking de factores que limitan la actividad de las empresas. La crisis económica en la que se desenvuelve la economía desde el segundo semestre de 2007, unida al elevado desempleo que repercute en una mayor contracción del consumo, son las principales razones esgrimidas por los empresarios que han participado en esta consulta.

El siguiente factor en importancia es la debilidad de la demanda, con una tasa de respuesta del 49,4%, seguido del aumento de la competencia (14,8%) y las dificultades de financiación (7,6%).

Sólo mejoró la confianza en hostelería

La confianza de las empresas industriales registra una nueva caída, hasta situarse en -16,3 puntos, debido al comportamiento negativo de la cifra de negocio y del empleo. La aportación de la inversión fue positiva pero insuficiente.

En el sector de la construcción, el ICE presenta también un empeoramiento que lo coloca en -7,5 puntos, siete puntos por debajo del valor de julio, como consecuencia de una trayectoria negativa en todas las variables: cifra de negocio, empleo e inversión.

Dentro de los servicios, sólo el sector hostelero registra una mejora, fruto de la positiva aportación de la inversión y del empleo, aunque este último en menor medida. El comercio y otros servicios muestran empeoramientos en la confianza empresarial.

Según la encuesta (que pregunta a casi 1.200 empresas), la cifra de negocio ha disminuido para un 42,2% de los empresarios cántabros durante el tercer trimestre de 2011, mientras que se mantuvo estable para un 40,9%. Un 16,9% declara una mejoría.

En cuanto al número de trabajadores contratados, el 81,9% los mantuvo, el 12,8% redujo su número y un 5,3% aumentó su plantilla. Los precios siguieron estables para un 75,4% de los empresarios encuestados, subieron para el 4,6% y bajaron para un 20%.

La mayoría (89,5%) de las empresas sostuvieron el nivel de inversión en el tercer trimestre del año. El 7,8% redujo su volumen de inversión y el 2,7% lo aumentó. Las exportaciones crecieron para un 24,5% de los empresarios cántabros, siguieron igual para un 47,1% y disminuyeron para el 28,4% restante.

Pesimismo para el último trimestre

Para el último trimestre del año los empresarios cántabros consultados esperan que la situación empeore nuevamente, según el Indicador de Expectativas, que se mantiene en tasas negativas tras el valor positivo registrado en el primer trimestre.

El Índice de Confianza Empresarial (ICE) analiza trimestralmente la coyuntura económica tanto nacional como regional, y predice el entorno en el cual se desarrolla la actividad económica. Tiene un margen de error máximo del +/-2,75% y un nivel de confianza del 95%, según la Cámara.