El Instituto del Corcho, la Madera y el Carbón Vegetal (Iprocor), junto a otros centros tecnológicos y empresas, estudiará las propiedades del corcho para su uso médico y el aprovechamiento de los residuos para nuevos fines comerciales, gracias a la concesión de 434.059 euros por parte la Consejería de Empleo, Empresa e Innovación.

El proyecto, presentado por el Iprocor junto con el resto de entidades y empresas, ha sido aprobado dentro de la convocatoria de ayudas que concede el Gobierno de Extremadura para proyectos de cooperación en sectores estratégicos, entre grupos de investigación y empresas; y cuya resolución se publicó este miércoles, 5 de octubre, en el Diario Oficial de Extremadura (DOE).

El proyecto está dividido en cuatro subprogramas: análisis de las propiedades anticancerígenas y antioxidantes de algunos compuestos del corcho; el estudio de las aguas de cocción del corcho para la reducción de los residuos, su aprovechamiento y reutilización. El proyecto aprobado incluye también el desarrollo de nuevos materiales de construcción basados en el corcho, según informa la Junta en nota de prensa.

'Valorización del sector corchero de Extremadura' es el título del proyecto que abarca varias áreas de trabajo, todas ellas con el objetivo de contribuir al desarrollo del sector corchero de Extremadura, abrir nuevas oportunidades de mercado, y aportar una solución a las industrias en la gestión de los subproductos y residuos agrícolas y forestales. De este modo, se ayudará a mejorar la eficiencia técnico-económico-ambiental de las empresas corcheras.

Además de Iprocor, que coordinará el proyecto, participarán otras tres entidades públicas: el Instituto Tecnológico Agroalimentario (Intaex); el Instituto Tecnológico de Rocas Ornamentales y Materiales de Construcción (Intromac) y la Universidad de Extremadura.

También participarán las empresas corcheras Extracor-Ava; Augusta Cork; Corchos Telesforo Martín e Hijos; e Higinio Rodríguez Morujo, todas ellas de San Vicente de Alcántara; la empresa de gestión de recursos hídricos Agua y Gestión del Ciclo Integral, de Sevilla y con sede en Extremadura; y la constructora Estructuras Tartessos-Estarsa, de Puebla de la Calzada. En total, 43 investigadores, de ellos 10 de Iprocor.

Dos de los subproyectos que se desarrollarán están orientados a la investigación médica. Por un lado, los investigadores estudiarán y analizarán compuestos bioactivos del corcho para evaluar sus propiedades antioxidantes y su aplicación en la lucha contra las enfermedades degenerativas.

El otro subprograma se centrará específicamente en el análisis de compuestos del corcho con propiedades anticancerígenas con el fin de aportar nuevas herramientas en la investigación contra el cáncer, como el de mama, próstata, colon y la leucemia.

Residuos de las industrias corcheras

En este caso, se trata de aportar nuevas técnicas para una mejor gestión de los residuos de la industria corchera en Extremadura, conseguir una reducción de los mismos y lograr su aprovechamiento y reutilización en aplicaciones de biomasa, para compostaje y fertilizantes, entre otras.

Se diseñarán instalaciones de distintas tecnologías para reducir los efluentes residuales y así poder evaluar su viabilidad.

Nuevos materiales del corcho en la construcción

El proyecto pretende impulsar el uso de subproductos y residuos generados por la industria corchera como alternativa en la fabricación de hormigones y morteros para su uso en paneles de cerramiento.

Mediante ensayos y pruebas de laboratorio, los investigadores trabajarán en perfeccionar y optimizar el producto, el proceso de producción, para dar respuesta a las exigencias y requerimientos que precisa el mercado en este tipo de materiales.