Curro con química

Su formación no es tan vistosa como otras pero cuentan con una gran salida profesional en empresas de todo tipo.
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F. Blanco
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«Los controles de calidad, que ellos pueden hacer, son necesarios en todos los sectores», aseguró la jefa del departamento de Química del instituto Ramón y Cajal, María del Carmen Vallejo. A esta salida se unen también trabajos en depuradoras, tratamiento de residuos y laboratorios, entre otros.La oferta de esta familia profesional son dos grados superiores; Química Ambiental y Análisis y Control, y uno medio, Laboratorio. En ellos, la mayoría de los estudiantes son chicos, aunque el número de mujeres está aumentando mucho en los últimos años.

Como en cualquier formación profesional, la carga práctica es muy grande, lo que precisa de unos laboratorios dotados con los instrumentos que en la actualidad se usan en las empresas.

«Llevamos muchos años con ellos, pero se cuida que estén actualizados», recalcó la jefa del departamento, quien añadió que se están introduciendo muchas más medidas de seguridad, principalmente con los materiales, muchos de ellos inflamables. «Cumplimos todas las normas de seguridad y nunca ha habido ningún susto», aseveró.

Uno de los problemas de esta formación es que muchas empresas utilizan a técnicos para empleos de licenciados. «Hay que tener claro las capacidades laborales de cada uno», finalizó.

Algunos datos de interés

Alumnos matriculados: 120. Grado de inserción: entre el 60 y el 75%. Duración: 1 año y 6 meses. Se imparte: Instituto Ramón y Cajal.

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