La Alianza por la Unidad del Campo formada por las organizaciones agrarias COAG y UPA contabilizó en 2010 un total de 2.148 ataques de lobos sobre ganado en la Comunidad de Castilla y León, lo que incremente considerablemente la cifra aportada este martes en el Comité de Seguimiento del Plan de Conservación de esta especie, pues las organizaciones contabilizan todos los ataques que aseguran sufrir los ganaderos.

Según datos de las organizaciones recogido por Europa Press, Castilla y León alberga "la mayor población de lobos de toda España con más de doscientas manadas", lo que nos hace que estimen que existen "en torno a dos mil lobos en la Comunidad", algo que, a su juicio, "exige una gestión racional por parte de la Consejería de Medio Ambiente sobre la población de estos cánidos" cuya existencia consideran "no compatible" con la ganadería extensiva.

Los datos que manejan las organizaciones indican un "aumento considerable" de los ataques de lobos en los últimos años que hace que la situación sea "insoportable", así, se ha pasado de 523 ataques y 1.407 reses muertas en 2007 a 2.148 ataques y 5.778 cabezas de ganado muertas en el pasado año. El incremento de ataques con respecto a 2009 sería del 62 por ciento y la valoración económica de los daños ha pasado de 1,2 a 2 millones.

En este sentido, el secretario regional de UPA en Castilla y León, Julio López, ha explicado que los datos de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente son "mentira", ya que "sólo cuentan los ataques a ganaderos que tienen seguro".

De hecho, ha añadido López, la propia Junta ha reconocido que los datos que maneja esta organización agraria son "más fiables" porque algunos de los ganaderos que sufren ataques y que no tienen seguro lo comunican a UPA.

A juicio del comunicado, la "política de potenciar la expansión del lobo por toda la Comunidad Autónoma" ha propiciado que prácticamente en todas las provincias de Castilla y León haya un gran número de manadas de lobos de forma permanente siendo las explotaciones ganaderas extensivas de la región el blanco de sus ataques.

Así pues, "lo que no hace mucho tiempo se reducía a daños en el ganado que pastaba en zonas remotas de la sierra, ahora los ataques se producen incluso a plena luz del día, ante la presencia de los ganaderos, en rediles cercanos al casco urbano de los pueblos, o ante la presencia numerosa de mastines".

Sobre el Plan de Conservación y Gestión del Lobo tramitado y aprobado por el Gobierno Regional consideran que "ha facilitado una peligrosa expansión de estos animales, muy difícil de controlar en estos momentos, ya que, más de dos mil ejemplares se mueven libremente por toda la comunidad autónoma provocando destrozos en las explotaciones ganaderas".

Según su opinión las indemnizaciones se reducen a los ataques sufridos en terrenos cinegéticos gestionados por la Administración Autonómica al norte del Duero y en el resto debe existir al menos un seguro que cubra los daños ocasionados, siendo compensada la franquicia directamente por la Conserjería.

De hecho, este sistema es "el más perjudicial" para los intereses de los profesionales. En concreto, la suscripción de un seguro por parte de los ganaderos obligando a estos a asumir un coste añadido en la explotación. Además, la diferencia entre el coste calculado por UPA y COAG y las indemnizaciones finalmente concedidas por la Junta (300.000) euros deja una diferencia de más de 1,7 millones.

"el número puede ser mayor"

Asimismo, han recalcado que los datos están referidos a la información facilitada por los ganaderos a UPA y COAG, "por lo que el numero de ataques y muertes es considerablemente mayor".

Por todo ello, han subrayado que el Gobierno de Castilla y León tiene la obligación de promulgar Leyes y Decretos que permitan compatibilizar el Desarrollo Rural mediante la actividad ganadera con el aprovechamiento de los recursos naturales, "por lo que es injusto que recaiga todo el coste del mantenimiento de una especie protegida por la Administración regional sobre el colectivo de los ganaderos".

De esta manera, el próximo 29 de septiembre la Alianza expondrá a la Junta en una reunión sus reivindicaciones sobre la gestión del lobo y aseguran que no aceptarán propuestas de la Conserjería de Fomento y Medio Ambiente "que pase por la obligación de los ganaderos de suscribir seguros para ser indemnizados en caso de sufrir ataques del lobo". Además, defienden que declarar al lobo como especie cinegética al sur del Duero, "no evitara los continuos ataques al ganado tal y como esta ocurriendo en las provincias situadas al norte".

Las organizaciones consideran que la gestión debe realizarse "con total transparencia y colaboración de los diferentes agentes sociales y muy especialmente con los afectados, para que en ningún caso se convierta en una carga en forma de presión insoportable para las explotaciones ganaderas que sufren los ataques de estos depredadores".

Como han recordado, el lobo es un animal salvaje con pocas posibilidades de alimentarse en ciertas zonas y épocas del año, sobre todo cuando el número de manadas es tan elevado como el actual, lo que "ejerce más presión sobre la cabaña ganadera, especialmente en terneros y ovejas."