Detenidas dos personas portuguesas por coacciones y amenazas a vecinos de dos urbanizaciones de Mérida

El Cuerpo Nacional de Policía (CNP) ha detenido a dos personas, I.B.D.S. de 36 años y M.B.D.S. de 20 años, de nacionalidad portuguesa, por su presunta autoría en delitos de coacción y amenazas contra vecinos de dos urbanizaciones de Mérida.

El Cuerpo Nacional de Policía (CNP) ha detenido a dos personas, I.B.D.S. de 36 años y M.B.D.S. de 20 años, de nacionalidad portuguesa, por su presunta autoría en delitos de coacción y amenazas contra vecinos de dos urbanizaciones de Mérida.

Además, en el momento de proceder a su detención por parte del CNP, estos dos individuos "intentaron darse a la fuga", siendo interceptados por vehículos policiales "inmediatamente".

Por ello, a estas dos personas, con antecedentes policiales, también se les imputa un delito contra la seguridad del tráfico y resistencia y desobediencia a agentes de la Autoridad, por lo que se les ha intervenido el vehículo "de alta gama" en el que viajaban.

Según ha informado el Cuerpo Nacional de Policía en una nota de prensa, los detenidos pertenecen a una misma familia y utilizaban presuntamente el 'modus operandi' conocido como 'vecinos indeseables'.

Este método consiste en que uno de ellos y generalmente con buena presencia, realizaba contratos de alquiler en urbanizaciones de nivel medio, y seguidamente otros miembros de la familia se introducían en el domicilio y comenzaban a realizar acciones contrarias a las reglas estatutarias de la urbanización.

Además, al mismo tiempo "efectuaban" presuntamente "amenazas graves de muerte a los vecinos" para conseguir que éstos "presionasen bien a la inmobiliaria o bien al propietario del piso para rescindir el contrato de alquiler".

Así, "una vez comunicado por parte de la inmobiliaria o propietario del piso alquilado la intención de rescisión del contrato por actitudes incívicas y por las amenazas y daños causados, estos individuos se negaban a abandonar el inmueble, exigiendo para ello al arrendador el pago de una cantidad de dinero desorbitada".

De este modo, en las dos urbanizaciones afectadas en Mérida, los detenidos exigieron pagos de 300.000 y 100.000 euros respectivamente para abandonar dichas urbanizaciones, "no sin antes efectuar amenazas graves en caso de comunicarlo a la autoridad correspondiente, consiguiendo de esta forma amedrentar y asustar al vecindario".

Los detenidos, tras la tramitación de las pertinentes diligencias policiales, fueron puestos junto al atestado practicado a disposición judicial, quedando en libertad con cargos.

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