CC.OO. de Cantabria es "bastante pesimista" respecto a la situación de la región en lo que queda de año y en 2012 "si no cambian las políticas", ya que el informe general del sindicato apunta a un "paro galopante" y una situación económica "incapaz de frenarlo".

En este contexto en el que va "empeorar bastante el desempleo" en el último trimestre, CC.OO. ha reivindicado un gran pacto por el empleo, que incluye pactos de rentas, de beneficios, fiscal, de precios y por la vivienda, además de la reforma del sistema financiero y un "verdadero contrato de formación y empleo".

Este pacto por el empleo, que el sindicato presentará al nuevo Gobierno que se formará tras las elecciones del 20 de noviembre, se trasladará al Ejecutivo de Cantabria, tras el compromiso de su presidente, Ignacio Diego, de llevar a cabo la concertación social.

Así lo ha manifestado este lunes el secretario general de CC.OO., Vicente Arce, en una rueda de prensa previa a la celebración del Consejo Regional de este sindicato, máximo órgano entre congresos, y que analizará la actual situación económica y del empleo de la región y sus perspectivas de cara al próximo año.

En este sentido, Arce ha señalado que en la reunión que mantuvo con Diego y la consejera de Economía, Hacienda y Empleo, Cristina Mazas, se le informó de la "situación complicada" de Cantabria para "cuadrar" el presupuesto de 2012 en la medida que el Gobierno de España no cumpla los compromisos adquiridos con la comunidad —como la financiación del Hospital Marqués de Valdecilla y de la autovía del agua— y le pidió "ayuda" en la reivindicación ante Madrid, cuestión que Arce planteará al Consejo.

El Ejecutivo regional, por su parte, se comprometió a enviar un borrador de la concertación a CC.OO. "que todavía no ha llegado". "Pero el compromiso de la concertación está hecho y nosotros estamos elaborando propuestas que llevaremos al Gobierno de Cantabria", ha afirmado el secretario general.

Al respecto, ha precisado que Diego les ha pedido "dar la vuelta, no seguir el mismo rumbo" de la concertación anterior, y el sindicato es consciente de que el presupuesto de la comunidad para el año próximo será "restrictivo", calcula que de "un 10 por ciento o más". En este contexto, CC.OO. planteará el pacto por el empleo y una reforma fiscal, cuestión esta última donde Arce cree que el sindicato "chocará" con el Gobierno regional, "que va en sentido diferente".

El sindicalista ha defendido ante el presidente regional que está "de acuerdo" con la austeridad en el gasto público pero en su opinión esta medida "no es suficiente" porque para reactivar la economía es necesario un presupuesto inversor, "imposible" sin una subida y recuperación de impuestos (Sucesiones, Sociedades y Patrimonio), la lucha contra el fraude fiscal y un afloramiento de la economía sumergida.

"En Cantabria tendremos que hacer un gran esfuerzo para convencer al Gobierno de que es necesario tocar la fiscalidad", ha señalado Arce, quien ha apuntado la existencia de foros que hablan de una "segunda recesión" y ha insistido en que los datos en la región "han empeorado bastante".

Así, ha recordado que la comunidad ha "liderado" la pérdida de empleos en el último ejercicio, con 3.723 parados más que hace un año; está dos puntos por debajo de la media en desempleados que no reciben prestación; y el 92,5 por ciento de los contratos firmados han sido eventuales, lo que evidencia la "precariedad" en el empleo.

El secretario general de CC.OO. ha insistido en que estos datos "empeorarán bastante" en el último trimestre, donde además se prevé un crecimiento no superior al uno por ciento con lo que "será imposible crear empleo este año y, si no cambian las políticas, también en 2012".

En este contexto, a Comisiones Obreras le toca "reivindicar nuestra postura en la sociedad" y así se lo trasladará Arce al Consejo. "Queremos seguir siendo un referente para los trabajadores y la sociedad en general", ha manifestado, recordando que el próximo sábado unos 20.000 representantes del sindicato se reunirán en Madrid para reivindicar "un gran pacto por el empleo".

Un pacto que incluye un pacto de rentas "no sólo de salarios"; un pacto de beneficios, por el que las empresas se comprometan a reinvertirlos en productividad; un pacto fiscal, de recuperación y subida de impuestos; un pacto de precios en bienes y servicios básicos como electricidad, gas, transporte y alimentación; y un pacto por la vivienda, que potencie el alquiler.

Además se pretende una reforma del sistema financiero "más allá de las cajas" de ahorros, y un "verdadero contrato de formación y empleo" para dar cobertura a los más jóvenes y vinculado a una Formación Profesional "de calidad", ofrecida por centros homologados y que imparta certificados de profesionalidad.