El inicio del curso escolar lleva aparejado para muchos padres, junto al gasto por libros o material, una preocupación extra: el contagio de piojos, un insecto que solo vive en humanos y que se transmite de cabeza a cabeza con gran facilidad.

Para prevenir este contagio los dermatólogos recomiendan evitar el contacto directo entre las cabezas de los pequeños, perfumar a los niños, cepillarles el pelo y recogérselo, en el caso de las niñas, y revisar bien el cabello.

La llamada 'pediculosis capitis', conocida vulgarmente como 'tener piojos', es una infestación por un pequeño parásito hematófago, que va pasando de unos humanos a otros y que se produce sobre todo entre el colectivo infantil, según ha explicado a Europa Press Televisión el dermatólogo Vicent Alonso, quien ha comentado que los colegios son "el caldo de cultivo perfecto" para estos insectos, ya que los niños están "más agrupados".

Los principales síntomas son los picores, si bien el doctor Alonso, dermatólogo en el Hospital 9 d'Octubre de Valencia, ha explicado que esta sensación solo se produce en el 30 por ciento de los casos —y es debida a una especie de alergia que causa la saliva del insecto—, por lo que es importante "revisar" bien las cabezas de los niños, especialmente en nuca y detrás de las orejas, donde la temperatura corporal es más alta y gustan más a estos insectos.

Para prevenir el contagio, Alonso ha indicado que habría que evitar el "contacto directo" de las cabezas, algo "muy difícil cuando hay dos niños haciendo un puzzle o intercambiando cromos", por ejemplo. Por eso, ha subrayado, cuando hay una epidemia en el colegio "es importante que padres y maestros insistan a los niños en que intenten no jugar cabeza con cabeza".

Perfumar el pelo

El doctor Alonso, quien ha señalado que la infestación por piojos "va por ciclos y es difícilmente erradicable", ha aconsejado también que las niñas lleven el pelo recogido cuando van al colegio, ya que los insectos acuden sobre todo al pelo largo, y cepillar al cabello "varias veces al día" para debilitar a los posibles piojos y evitar que pongan huevos, así como llevar a los niños perfumados con colonias o esencias de herbolario como lavanda, árbol de té o geranio.

El dermatólogo ha comentado que en casos concretos pueden "ser útiles" también los repelentes farmacológicos, aunque no se ha mostrado partidario de un uso prolongado, porque "podrían resultar tóxicos".

Para eliminar los piojos existen lociones, cuyo uso siempre debe ir acompañado de la "retirada mecánica de piojos y liendres" con un peine de púas muy finas o liendrera, "incluso varias veces al día" para dañarlos. "Si les das con el peine igual es más difícil que ponga huevos", ha agregado al respecto.

Remedios caseros útiles

Son también "importantes" remedios caseros como el vinagre, que "puede ayudar un poco a atenuar la capacidad del piojo de reproducirse" y que suelta las liendres. El vinagre, ha explicado, debe aplicarse con el cuero cabelludo seco, un poco caliente, y aplicarlo durante dos horas con un gorro.

El dermatólogo ha recomendado a los padres que "no cunda el pánico" cuando encuentren piojos en sus hijos, ya que estos insectos "habitan en cualquier cuero cabelludo" y "muchas veces no discriminan ni por higiene, ni por sexo ni por ningún otro condicionante".

Ante todo, les ha aconsejado "calma, paciencia, constancia y observación continua", así como acudir al pediatra o dermatólogo para que haga un diagnóstico visual de la infestación y, sobre todo, porque los niños al rascarse pueden provocarse infecciones secundarias "que hay que tratar".

El doctor ha insistido en la importancia de la retirada mecánica de los piojos y aconsejó a los padres que se tomen su tiempo y cuando noten a sus hijos un poco inquietos o irritables, con el pelo un poco alborotado y que se rascan la cabeza, se sienten con buena luz y traten de identificar a estos insectos.