Cientos de personas han visitado la tercera edición del Mercado Ecológico, que está organizado por la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) y que se ha desarrollado en la plaza de España de Valladolid.

De esta manera, según ha explicado el presidente del Consejo de Producción Ecológica de Castilla y León, Juan Senovilla, la sociedad ha podido acercarse a este tipo de productores y productos de una manera "más directa", sin intermediarios. Una iniciativa que, en opinión de la responsable de la tienda vallisoletana Écolo, Susana García, "debería realizarse más veces".

Senovilla ha informado a Europa Press de que una compra formada por productos ecológicos tiene ventajas como la frescura, la calidad, el evitar los intermediarios —por lo que se potencia socialmente la agricultura— y el respeto al medio ambiente y a la propia salud, unos beneficios que son "más importantes", según Susana García, que el "mayor precio" de estos bienes respecto a los productos industriales.

Por su parte, el presidente de la Diputación de Valladolid, Jesús Julio Carnero, ha mencionado que la Institución provincial "siempre" apoyará este tipo de actos —"más aún en una provincia agrícola como Valladolid"—, que cada año "van a más".

De hecho, Senovilla ha aseverado que "el éxito esta iniciativa pone de manifiesto que existe una demanda no satisfecha" de este tipo de productos, algo que genera una situación "paradójica", ya que "mientras en el comercio convencional se están cerrando tiendas minoristas", en lo referente a productos ecológicos, "va en aumento".

El presidente del Consejo ha explicado que este órgano garantiza que "todo lo vendido como ecológico lo sea" y evita que se den situaciones de "oportunismo e intrusismo" con productos convencionales.

Más de 30 puestos han expuesto, vendido e informado en esta edición sobre productos como todo tipo de hortalizas, frutas, legumbres, helados, conservas, miel, galletas, verdura, vino, aceite, pasta, pan, leche, queso, cosmética, flores, plantas, mermeladas, sal, aceitunas, chocolates, infusiones, azúcar, café, frutos secos y artesanía.

Entre los expositores de venta de productos ecológicos, también se encontraba el puesto de la asociación vallisoletana de enfermos de Sensibilidad Química Múltiple (SQM) 'Alas de Mariposa', que según ha explicado su presidenta, Irene Escudero, representa a un colectivo de enfermos que toleran mal los productos químicos añadidos a los alimentos, objetos o ropa, entre otras cosas.

Asimismo, la representante de esta organización ha criticado —citando declaraciones del Doctor Antoni Fernández Solá— la labor de las administraciones, pues "han dado órdenes a los médicos públicos para que no diagnostiquen esta enfermedad", ya que en opinión de Escudero, es una patología "políticamente incorrecta que denuncia la sociedad de consumo actual".

También ha incidido en que los enfermos de SQM sufren de "gran aislamiento social" y de incomprensión laboral, ya que en ocasiones, se los acusa de "buscar la incapacidad",, por lo que ha pedido que, "igual que se quitan barreras físicas, deben eliminarse barreras químicas" a lo que ha sumado la necesidad de aumentar el número de facultativos especialistas en salud ambiental.

El Mercado ecológico, además de estar organizado por la Unión de Campesinos, cuenta con la colaboración del Ayuntamiento y la Diputación de Valladolid, del Consejo de Producción Ecológica de Castilla y León, y de las entidades financieras Caja España-Caja Duero, Cajamar y La Caixa.