La Junta de Andalucía adeuda un total de 40 millones de euros a las empresas constructores del Metro de Granada, del que ya han paralizado un tramo en obras, en el barrio de la Cruz, ante el impago de las certificaciones por parte de la Administración autonómica.

Así lo ha señalado a Europa Press el secretario general de la Asociación de Constructores y Promotores de Granada, Francisco Martínez Cañavate, que ha alertado además de que el resto de los tramos también se encuentra en una situación "límite", lo que ha provocado una "ralentización de los trabajos".

Según Martínez Cañavate, la Junta no ha pagado a las empresas las certificaciones de obra desde enero hasta julio, con lo que están "absolutamente inesperadas". De hecho, no podrán cumplir el calendario previsto, por el que se había acordado agilizar las obras para culminar en determinados tramos para el 15 de septiembre. "Eso suponía dos millones de euros más, una cantidad que es lógicamente inasumible para unas empresas que llevan ocho meses sin cobrar", ha incidido.

Para el representante de los empresarios, la consecuencia de estos impagos será el despido de personal en el próximo mes de septiembre si no empieza a entrar dinero en las responsables de las obras. Las constructoras confían en que el crédito solicitado por la Junta al Banco Europeo de Inversiones (BEI) de un total de 260 millones de euros pronto podrá ser efectivo.

No obstante, critican que la Administración no haya aún avalado el 50 por ciento de ese crédito, tal y como le exigía el BEI. "Debería haberlo avalado hace meses, pero titubeó y ahora estamos sufriendo las consecuencias. Las empresas podrían ya haber cobrado si la Junta hubiera avalado el crédito para poder formalizarlo", ha censurado Martínez Cañavate, que ha criticado el "desastre absoluto" de programación financiera de la administración en este caso.