La exposición conmemorativa del 125 aniversario de la fundación de la Estación de Biología Marina de Santander ha abierto sus puertas en el Museo Marítimo del Cantábrico, donde permanecerá hasta el próximo uno de noviembre. El acto de inauguración ha contado con la presencia del director general de Cultura, Joaquín Solanas, y el director del Museo, Gerardo García-Castrillo.

Solanas afirmó el interés de la Consejería de Cultura por "apoyar" este tipo de iniciativas que se verán reforzadas en el futuro, pues el objetivo es "optimizar" y "rentabilizar al máximo" los centros y museos dependientes de este departamento.

Asimismo, el director general de Cultura anunció que una de las líneas maestras de su labor será la de fomentar la "coordinación entre distintos centros" y de esa manera crear "sinergias" que ayuden a una mejor difusión de nuestra cultura y patrimonio, según informa el Gobierno regional en un comunicado.

Por su parte, Gerardo García-Castrillo afirmó que esta muestra es fruto del "trabajo en equipo" y que recoge la labor realizada por la estación marítima en el periodo comprendido entre 1886-1914. Subrayó que las piezas que se exhiben están hechas de material reciclable, "por lo que no generará residuos ambientales", continuó diciendo.

La muestra intenta describir las tres funciones básicas de la Estación Marítima, institución pionera en nuestro país: investigación, con la recogida de muestra; formación, ya que acudían estudiantes y lo más famosos naturalistas del siglo XX. Y por último, la difusión "una tarea, afirmó García-Castrillo, prioritaria para el fundador Augusto G. Linares", y que comenzó con los acuarios para terminar en el Museo Marítimo.

La Estación Marítima de Zoología y Botánicas Experimentales en Santander (1886), fue la primera institución de este tipo en España, gracias a la labor de Don Augusto González de Linares quien también fue su director.

Diseñada y montada en la sala Naos del MMC por el propio equipo del museo, muestra más de 70 fondos museográficos y documentales datados entre 1886 y 1907, de la colección de la Estación de Biología Marina, depositada en el Museo Marítimo del Cantábrico por el Instituto Español de Oceanografía, como material de muestreo, microscopios, instrumental, especímenes recolectados a finales del siglo XIX, acompañados por dibujos originales, documentos y fotografías.