Antonio Salvà, padre de Diego Salvà, uno de los dos guardias civiles asesinados durante el atentado de ETA perpetrado hace hoy dos años en Palmanova, ha asegurado que la organización terrorista cuenta con "simpatizantes" en Mallorca, por lo que la isla, según él, ya no es la "de la calma".

Durante un acto de homenaje a su hijo y al otro guardia civil fallecido, Carlos Sáenz de Tejada, Salvà ha agradecido tanto a los anteriores responsables políticos como a los actuales el apoyo prestado.

No obstante, ha reprochado algunos actos que se han celebrado en la isla durante estos dos últimos años como la visita a Sa Pobla de una activista catalana que había sido condenada por colaborar con el Comando Barcelona o el hecho de que la Universitat de les Illes Balears (UIB) acogiese una charla del dirigente de la izquierda abertzale Tasio Erkizia, por lo que ha criticado duramente que la rectora, Montserrat Casas, "consintiera" esto.

Además, ha dicho sentirse "traicionado" por jueces y políticos, quienes están "negociando" con ETA, según ha afirmado. Salvà ha lamentado que "se excarcelen etarras", se produjese la legalización de Bildu, o que se "negocie con asesinos".

Asimismo, ha augurado que próximamente se derogará la Ley Parot, y se producirá la adhesión de Navarra a Euskadi, "previa legalización de Sortu".

Por todo ello, el padre del guardia civil asesinado ha pedido que todos los delitos terroristas que tengan lugar en Europa sean juzgados en un tribunal europeo "para evitar el cachondeo de la manipulación política" y para estar "más protegidos". De esta forma, "Troitiño, el asesino de Noruega o De Juana no tendrían penas 'ligth'", lo que es, según ha remarcado, "una auténtica vergüenza".

Salvà ha hecho hincapié en la necesidad de "no olvidar" que los etarras "no han entregado las armas" y que están "dispuestos a asesinar".

Por su parte, el delegado del Gobierno en Baleares, Ramon Socías, ha sido preguntado por los medios de comunicación sobre estas palabras y ha indicado que se debe entender "el contexto en el que están hechas" y que ambas familias han "dado muestras de una entereza muy importante".

"Se puede entender perfectamente que en un acto emotivo como este puedan surgir palabras como las que han salido de la boca del doctor Salvà", ha concluido.