Una imputada fue contratada con fondos públicos para hacer sondeos a personas que luego eran invitadas a fiestas

Una imputada que ha prestado declaración ante la jueza instructora del caso Voltor ha aseverado que fue contratada por el Consell de Mallorca para realizar encuestas a personas de nacionalidad española y argentina, presuntamente dirigidas a captar votos para UM, y quienes después eran invitadas a fiestas en las que participaba "algún que otro personaje político", como el entonces vicepresidente insular y ex presidente 'uemita' Miquel Nadal.

Una imputada que ha prestado declaración ante la jueza instructora del caso Voltor ha aseverado que fue contratada por el Consell de Mallorca para realizar encuestas a personas de nacionalidad española y argentina, presuntamente dirigidas a captar votos para UM, y quienes después eran invitadas a fiestas en las que participaba "algún que otro personaje político", como el entonces vicepresidente insular y ex presidente 'uemita' Miquel Nadal.

Así lo ha puesto de manifiesto Liliana Serra durante su comparecencia ante la titular del Juzgado de Instrucción número 10, Carmen Abrines, en la que ha señalado que fue el ex presidente de la Casa Argentina de Baleares, Jorge Mandado -imputado en el caso Maquillaje- quien le envió al Consell "porque me iban a contratar" y, tras hablar con el ex director insular de Relaciones Institucionales, Josep Lliteres, firmó el contrato con el Consorcio de Informática Local de Mallorca (Cilma).

Tal y como ha señalado, su labor consistía en hacer encuestas y entregar el resultado a Osvaldo Frías, quien también declaró este lunes como imputado, si bien, al ser preguntada por el programa Infomallorca, ha asegurado que es la primera vez que escucha este nombre. En este sentido, las investigaciones apuntan a que numerosos activistas de UM fueron contratados con motivo de la puesta en marcha de este proyecto junto al de EIEL y Mallorca Digital, que habrían servido para camuflar su colocación.

Por su parte, también ha comparecido la ex gerente del Instituto Municipal de Formación Ocupacional y Trabajo (Imfof) Catalina Payeras, imputada en el caso Voltor y que ya fue detenida en el marco del caso Picnic, quien ha afirmado ante la jueza que Lliteres, el ex conseller de Deportes Mateu Cañellas, el ex director insular de Comunicación, Antoni Martorell, intervenían en las instrucciones que la encausada recibía tras ser contratada para Mallorca Digital.

Según ha explicado, las condiciones laborales se las dio la ex secretaria técnica de Nadal, Eugenia Cañellas, y a pesar de que estaba contratada como auxiliar encuestadora, su trabajo se centraba en ayudar en el control presupuestario, partidas económicas y elaboración de informes. Es más, ha manifestado que en las elecciones de 2007 ayudó como apoderada de mesa porque se lo pidió Cañellas, imputada por su parte en el caso Maquillaje.

Otra encausada ayudó en la creación de asociaciones

Mientras tanto, otra de las encausadas que ha desfilado este martes por el Juzgado ha sido Lucía Stella Duque quien, bajo las órdenes de Lliteres y contratada por el Cilma, debía realizar encuestas sobre los colectivos latinoamericanos, recoger información sobre las asociaciones de inmigrantes que existían y ayudar a la creación de éstas, centrándose en la cantidad de personas que había en las distinas entidades y en cuántos colectivos había en la isla.

"Nunca fui a trabajar al Cilma, sino que a diario iba al Consell, donde estaba Lliteres", ha añadido la imputada, quien ha asegurado no haber oído nunca el nombre de EIEL, y ha señalado además que fue en 2008 cuando se afilió a UM después de que así se lo dijese Lliteres.

Finalmente, otro imputado, José Juan de la Peña, ha apuntado que fue contratado como auxiliar en el proyecto Mallorca Digital, aunque ha precisado que nunca fue al Cilma sino que sólo trabajó en el Consell. Tal y como ha recordado, sus funciones dependían tanto de Eugenia Cañellas como de Catalina Payeras.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento