El XVII Festival Internacional BluesCazorla 2011, que arrancó en Cazorla (Jaén) el pasado jueves, ha concluido a primeras horas de la mañana de este domingo con un balance "muy positivo", en palabras del alcalde de dicho municipio jiennense, Antonio José Rodríguez (PSOE), quien, no obstante, ha reconocido que en esta edición se ha producido un "estancamiento" e incluso "un pequeño descenso" en la venta de entradas en taquilla.

En declaraciones a Europa Press, Rodríguez ha precisado que esta circunstancia ha roto la tendencia de incremento de las ventas en taquilla que se había vivido en ediciones anteriores, a la vez que ha recordado que esto sólo afecta a los conciertos celebrados en la plaza de toros de este municipio, "el único de los cuatro escenarios en el que se cobra por ver las actuaciones musicales".

A pesar de ello, el regidor de Cazorla ha valorado la afluencia de personas que han acudido a esta localidad en unas fechas como éstas de julio de "poco turismo" para el municipio, y que han permitido que haya habido una ocupación hotelera "del cien por cien tanto en Cazorla como en pueblos de los alrededores".

En este sentido, el alcalde ha reconocido que el motivo de que el festival se estableciera en julio fue la pretensión de "complementar un turismo escaso en Cazorla" en ese mes, a la vez que ha atribuido a las "actuales circunstancias económicas" el "pequeño parón" en la venta de localidades.

No obstante, según ha señalado Rodríguez, ello no ha afectado al impacto económico que genera el festival en el municipio —cifrado en unos ingresos de más de un millón de euros en 2010—, porque el número de personas que han acudido a dicho evento —aproximadamente 20.000— "se ha acercado al de la edición anterior", y "la gente que no ha entrado en la plaza de toros se ha quedado en otros lugares de Cazorla".

Además, el primer edil de Cazorla ha querido resaltar el "civismo" con el que se ha desarrollado el festival, que no ha registrado "ningún incidente", y que en esta edición, como ya hiciera el año anterior, ha intentado abrirse a otros géneros musicales "que beben del blues", para lograr así una mayor presencia de público, "más diversificado", lo que ha permitido que fuera M Clan el grupo que abriese el festival el pasado jueves.