Gestación en cinco meses

Bullón ve crecer la portada de la feria como si de un hijo se tratara. Es un proceso de casi cinco meses en el que un tubo se convierte en mecano; un mecano, en estructura; una estructura, en puerta con paneles de colores, y esa espectacular puerta, en portada de feria.

Desde hace años, el responsable del Acoplador (filial de Ferrovial-Agromán) se encarga de hacer realidad una maqueta que se presenta a los medios y que se convierte en símbolo de la fiesta. Durante décadas, Bullón trabaja codo a codo con Rafael Carretero, responsable técnico del montaje del ferial y hasta el año pasado diseñador de la puerta del cielo. Y además con carpinteros, electricistas, montadores, pintores y un sinfín de «duendes artesanos», de cuya «responsabilidad e implicación depende que todo llegue a tiempo, por mucha planificación que haya».

Hoy se iluminará esta portada que cada día custodia inmóvil la fiesta. Muchos la cruzarán cada día para preservar la tradición. Ramón lo hace «todos los días a las 7.30 para comprobar que no hay problemas». Los más feriantes incluso cumplirán cantando esa sevillana que dice: «Debajo de la portada me gusta verte pasar, cuando cantas sevillanas gitana por el Real».

Nuevos aires inspirados en la Exposición del 29

La pasarela: La portada de este año es la primera de una nueva era. Ricardo Suárez, su diseñador, se ha inspirado en el palco Real de la Maestranza, entre dos baluartes que simbolizan el acceso a la exposición del 29 y una arquería que representa la que hay en la plaza de toros. En blanco y albero, con una cúpula simulando una azulejería de tono azul. La superficie de la portada es de 52 m, la altura, de 43. Pesa 300.000 kilos y cuenta con 21.500 bombillas. Se ha tardado en ponerla en pie 17.000 horas y su coste ha ascendido a más de 400.000 euros.