La ola de calor que durante las últimas dos semanas ha azotado la región central de Estados Unidos ha llegado ahora a la costa este del país y se ha cobrado ya la vida de al menos 22 personas, según el Servicio Nacional de Meteorología estadounidense.

La agencia meteorológica anunció este jueves en su página web que la "peligrosa ola de calor" sigue en gran parte de la región central y este de EE UU y alertó de que se espera que el calor excesivo y la humedad se extiendan al Valle de Ohio y la costa este durante lo que queda de semana.

Según los últimos datos del servicio meteorológico, unos 20 estados superaron el miércoles los 37 grados.

Las temperaturas más altas previstas para el jueves afectarían a partes de la región central del país, el Valle de Ohio y la región atlántica, con los termómetros marcando máximas de 46 grados.

El diario The Washington Post adviertía en su portada que este viernes la región del medio-atlántico en la que se encuentra situada la capital será la más calurosa del país.

Al respecto, el Servicio Nacional Meteorológico indicó que la sensación térmica en Washington podría ser mayor de lo que indican los termómetros y superar los 46 grados.

Las alertas por exceso de calor afectan ya a más de 20 de los 50 estados del país y a alrededor de 141 millones de personas, en torno a la mitad de la población.

Los meteorólogos dicen que la ola de calor podría prolongarse hasta agosto en gran parte de la costa este de EE UU.

El sitio web AccuWeather.com ha pronosticado que la factura en víctimas, la presión sobre la red eléctrica debido a la mayor demanda de energía y los daños en carreteras y puentes podrían superar a los de la mortífera ola de calor de 1995.

"Una combinación letal de calor y humedad nos golpea. No habíamos visto una mezcla tan intensa en años", destacaba The Washington Post.