El "negativo" estado de la fuente de Virgen de los Reyes responde a los daños derivados de la actuación de 1995

Las obras para rehabilitar la fuente farola monumental que corona la plaza de la Virgen de los Reyes, junto a la Catedral hispalense, responden al "negativo" estado de conservación del monumento, debido "principalmente a la aparición de daños derivados directamente de la intervención realizada en 1995", por lo que se recomienda la actuación "urgente".
Estado Actual De La Fuente.
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Las obras para rehabilitar la fuente farola monumental que corona la plaza de la Virgen de los Reyes, junto a la Catedral hispalense, responden al "negativo" estado de conservación del monumento, debido "principalmente a la aparición de daños derivados directamente de la intervención realizada en 1995", por lo que se recomienda la actuación "urgente".

Según el informe elaborado por una restauradora licenciada en Bellas Artes de la Universidad Hispalense en cuanto al estado de conservación de este elemento protegido, el monumento sufre daños "graves" en determinados puntos, por lo que propone una actuación "puntual" para la rehabilitación del monumento. Así, insiste en la necesidad de que se trate de intervenciones de "urgencia o emergencia" a cuenta las "grietas" y la "pérdida del material de unión" entre las juntas que sufre el monumento.

El documento, recogido por Europa Press, indica que el estado de conservación es "negativo", debido principalmente a la aparición de daños derivados "directamente de la intervención realizada en 1995". En dicha actuación de los años 90 se llevó a cabo una intervención genera en toda la fuente, con la reconstrucción de volúmenes de piedra perdidos con marmolina y el sellado de fisuras con ensambles de acero, además de la reconstrucción de los bordes de los sillares y de las uniones de las veneras.

"La acción constante de la humedad y del agua durante 15 años ha ido mermando la capacidad de resistencia de las soluciones aportadas en aquella ocasión y que ha propiciado nuevos daños", explica. Así, insiste en la necesidad de actuar en las grietas "que habían sido solucionadas en el pasado, tras separarse el material origina del reconstruido; y los bordes, que "ha ido perdiendo estabilidad y consistencia con las últimas intervenciones".

Igualmente, menciona la separación abierta entre partes de la piedra originariamente juntas y de materiales de unión, y las zonas que están en contacto con el agua, "cuya vegetación y bacterias podrían provocar la descohesión del material pétreo".

En este sentido, señala que la intervención sería "puntual" con el objetivo de, no sólo subsanar los daños que presenta, sino de establecer soluciones que respeten las características del bien y guarden una fisonomía y estética para evitar cualquier tipo de contaminación de este entorno.

Así, indica que esta fuente farola, realizada por el escultor sevillano José Lafita Díaz en 1929, no debe ser entendida como algo "accesorio u ornamental, sino que constituye un elemento articulador del espacio e identifico de la zona". "Forma parte del entorno de las principales construcciones de la ciudad y el nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) la establece como Espacio Urbano Protegido", subraya.

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