La nueva responsable de Cultura, Ciudadanía y Participación de la Diputación de Sevilla, Beatriz Sánchez, ha querido agradecer a los espectadores "la acogida y el apoyo" que le están prestando Festival Internacional de Danza de Itálica 2011 —cuando se llega al ecuador de esta cita— al tiempo que ha animado a aquellas personas que aún no se hayan acercado al Teatro Romano de Santiponce, porque "ver danza en estas piedras milenarias, que acaban formando parte del espectáculo, es una experiencia que ningún sevillano se debe perder".

"En el Área contamos con un equipo con mucha experiencia, muy engrasado ya en la organización de Itálica y muy acostumbrado a los nervios iniciales, lógicos cuando buscas el beneplácito del espectador para una apuesta de programación —asegura Sánchez—. En esta edición, además, todos hemos sentido de cerca la presión que supone testar ante el público sevillano las adecuaciones del espacio escénico, que hemos realizado desde la Diputación, en el Teatro Romano del Conjunto Arqueológico de Itálica".

Sánchez añade, según se indica en nota de prensa, que la Diputación, como organizadora del Festival, "tenía en esta edición un gran compromiso adquirido con los sevillanos y una enorme prueba de fuego", ya que esta vuelta de Itálica al Teatro Romano, "es un objetivo por el que hemos estado muchos años trabajando, y todo tenía que estar en consonancia con este gran logro: un espacio escénico respetuoso con el entorno patrimonial pero, a la vez, cómodo, moderno, estético y acorde a las exigencias técnicas del Festival, y una programación capaz de atraer al público y de satisfacer todos los gustos por todas las tendencias', dice la diputada.

Además, y según los datos de Beatriz Sánchez, todas las representaciones que se han hecho en el Teatro Romano hasta ahora, han vendido todo el aforo y las entradas disponibles a través de venta anticipada para 'Aterballetto', 'Chinabaus', 'Fernando Romero' y 'Momix' se van agotando a buen ritmo. "Mi recomendación es que los espectadores interesados en acudir a estos espectáculos no esperen mucho más. Son muchas las personas que han acudido a las taquillas del Teatro, confiando en encontrar entradas de última hora, y han tenido que renunciar a ver la obra que deseaban", aconseja la diputada.

Más de 10.000

Visita online

Por otra parte, la Diputación ha informado de que han sido más de 10.000 las visitas que ha recibido la página web del Festival (www.festivalitalica.es) desde que se activara con la presentación del Festival a los medios de comunicación y a la opinión pública, el pasado día 14 de junio. De estas visitas, más de 4.000 se registraron en los nueve primeros días de julio. En el perfil Facebook, Itálica contaba con 478 amigos en tres semanas y con 63 publicaciones; en Twitter, ha generado 40 tweets, es miembro de dos listas y generó 27 seguidores en la primera semana del Festival.

Asimismo, en el canal Youtube se han contabilizado más de mil reproducciones en las dos primeras semanas del Festival y, desde Flickr, se contabilizaron 84 visitas en la primera semana. Además, 635 usuarios de Facebook activan 'me gusta' en las noticias sobre el Festival que aparecen en la web, desde la que se han realizado casi mil descargas de material de la zona de prensa.

La ménade en el cine de verano

De otra parte, el espectáculo audiovisual en el que la Ménade, imagen iconográfica del Festival, aparece proyectada bailando y presentando Itálica 2011, se proyectará, hasta que finalice el Festival el próximo 28 de julio, en el Cine de Verano Patio de la Diputación. De esta manera, los espectadores del Cine pueden conocer de primera mano y antes de la proyección el contenido del Festival.

El espectáculo, que dura 13 minutos, se inicia con la Ménade haciendo sonar su pandereta y dando paso a una coreografía, en la que las bailarinas se multiplican en un paisaje de columnas romanas que se descubre tras adentrarse el punto de vista del espectador en las montañas. Se trata de coreografías proyectadas con efectos en tres dimensiones, con música original de Miguel Marín (Árbol) e interpretación de María M. Cabeza de Vaca.