Según dice, el nuevo consejero tendrá que "asumir importantes retos" en este período legislativo como la aplicación de la reforma de la PAC; la "falta de liquidez" del sector agrario y, "sobre todo" la "mala rentabilidad" de las explotaciones extremeñas debido al "bajo precio" de los productos que reciben agricultores y ganaderos y el "aumento de los costes de producción".

En este sentido, para UPA-UCE se "convierte en una necesidad primordial regular las relaciones entre los diferentes eslabones de la cadena comercial", donde, bajo su criterio, los productores ocupan "el último lugar y no" tienen "capacidad para negociar ni para establecer un precio" para los productos que, "como mínimo", cubra los costes de producción.

Finalmente, la organización agraria señala que el nuevo consejero "siempre encontrará", en UPA-UCE, un "aliado en la defensa de las explotaciones familiares agrarias de Extremadura".