El Ayuntamiento del municipio sevillano de Alcalá de Guadaíra ha rechazado el "incomprensible" cierre de la factoría de Flex en la localidad y ha apostado por buscar soluciones que eviten la pérdida de empleo y que procuren un replanteamiento de la cierre. Además, ha expresado su "más sincera preocupación" por la situación de los trabajadores afectados, a quien ha mostrado su solidaridad.

En una nota, ha mostrado su solidaridad con los trabajadores afectados por el anuncio de cierre y se ha puesto a su disposición "en cuantas acciones se organicen para evitar los despidos y conseguir una solución que no conlleve la pérdida de empleo".

Así, el equipo de Gobierno ha expresado su "más sincera preocupación" por la situación de la empresa y, especialmente, por las familias afectadas por este problema. De hecho, miembros del gobierno local ya han mantenido algún contacto con representantes de los trabajadores a los que le han mostrado su rechazo a una "decisión incomprensible que provoca que, de nuevo, paguen las consecuencias los trabajadores, y se produzca el colapso familiar de aquellos que viven de su trabajo".

Según explica, Flex es una empresa líder en el sector que trabaja de forma internacional y que no debe plantearse la "drástica bajada de empleados y pérdida de puestos de trabajo precisamente en su país de origen". Por ello, el Consistorio quiere abrir una vía de colaboración con la empresa para que pueda replantearse esta decisión y minimizar sus consecuencias.

"Alcalá de Guadaíra es una ciudad que tiene como marca característica ofrecer facilidades a las empresas que finalmente crean riqueza y empleo en la zona, por lo que es doblemente triste que una factoría histórica en el municipio cierre sus puertas cuando otras precisamente se están instalando", resalta. Así, desde el Ayuntamiento se realizarán cuantos esfuerzos sean posibles para que esta situación no se produzca en beneficio de todos.

Precisamente, todos los grupos con representación municipal (PSOE, PP, PA e IU) llevarán al pleno ordinario la próxima semana una moción como medida de presión ante dicho anuncio apostando por el mantenimiento de la planta.

Por su parte, la portavoz del Grupo Municipal Andalucista en el Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra, Lola Aquino, ha mostrado su apoyo a los trabajadores y se ha ofrecido la posibilidad servir de canal de comunicación con el Pleno municipal del Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra, donde presentará una moción.

"El cierre de Flex significa la pérdida de una empresa señera en Andalucía, ocasionando la pérdida masiva de empleo, pero también supone que Andalucía y Alcalá vuelven a perder peso industrial, más allá de las causas económicas, sino como consecuencia de la globalización y las políticas neoliberales", añade en una nota. Aquino ha apostado por defender las propuestas de los trabajadores, "potenciando y mejorando la planta de Alcalá como forma de salir de la crisis y no cerrándola y deslocalizando la producción".