El Partido Andalucista (PA) se ha mostrado este jueves contrario a la posibilidad de modificar el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Sevilla, al entender que eso serviría para recalificar terrenos aledaños al segundo centro que la multinacional sueca Ikea quiere abrir en la capital hispalense y "favorecer así la especulación".

Así lo ha indicado en una nota de prensa, en la que dicha formación ha reivindicado la necesidad de defender los intereses de la mediana y pequeña empresa, así como de los autónomos sevillanos y andaluces, al ser "quienes reinvierten sus beneficios en nuestra ciudad", y no los de "las grandes multinacionales" o las empresas con sede social fuera de las fronteras de la comunidad andaluza, "que pagan sus impuestos fuera de Andalucía".

En este sentido, el PA ha calificado a las pequeñas y medianas empresas como "el verdadero motor económico de Sevilla", al ser "las que crean riqueza" en la capital hispalense, por lo que ha apostado por que "los sevillanos puedan identificar aquellos comercios que pagan todos sus impuestos aquí", a la vez que ha lamentado que en los últimos años hayan desaparecido "cerca de 7.000" pequeñas y medianas empresas en la capital hispalense.

Del mismo modo, el PA ha mostrado su rechazo a las grandes superficiales comerciales como Ikea porque, según este partido, "por cada puesto de trabajo que se crea en una gran superficie se pierden 2,5 en los pequeños comercios", y por el uso que le dan estas empresas a sus beneficios, que "suele reinvertirse en productos financieros especulativos", en contraposición a los de los pequeños comercios, que "se reinvierten en el ámbito local en su mayoría".

Asimismo, el PA rechaza el "exceso" de grandes superficies en una capital porque con ello se potencia "una ciudad deshumanizada, que fomenta el vehículo privado, la contaminación y el abandono de la ciudad histórica y las calles comerciales de los barrios".

Segundo ikea en sevilla

Esta reacción del PA responde al anuncio realizado esta semana por el alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, quien reveló que antes de que terminara el mes de julio estaría resuelto el problema urbanístico para la instalación del segundo centro de Ikea en Sevilla, que daría empleo a unas 4.000 personas y supondría unos 300 millones de inversión.

En este sentido, Zoido se mostró partidario de favorecer la instalación de este tipo de empresas para incrementar el tejido productivo, a la vez que advirtió de que el PGOU "se retocará las veces que haga falta por el beneficio de los sevillanos", siempre "con luz y taquígrafos", con el objetivo de beneficiar a la ciudad para crear empleo.

Por último, Zoido subrayó que "los especuladores saben que en Sevilla no tienen sitio y los inversores sí", a la vez que añadió que si la Junta rechaza estas modificaciones tendría que explicar "el porqué no le quiere dar una oportunidad a los sevillanos con un plan perfectamente adaptado a la ley".