El presidente de Foro Asturias (FAC), Francisco Álvarez-Cascos, ha considerado que Cajastur se ha convertido en "una caja mágica al servicio de una élite que la parasita en función de sus intereses".

En una rueda de prensa ofrecida este viernes en la sede del partido, en Oviedo, el ex ministro ha acusado la "hipocresía" del secretario general de la FSA, Javier Fernández, por acusar a FAC de querer poner la mano en la entidad cuando ellos "la tienen metida hasta el codo".

Así, y tras desgranar una serie de préstamos concedidos supuestamente en condiciones ventajosas al presidente de la entidad, Manuel Menéndez, al Partido Socialista, y a varios consejeros, ha asegurado que FAC tiene las manos "muy limpias" y ha instado a los demás a enseñarlas.

Además, ha discrepado de las opiniones vertidas por el líder de la FSA, a quien ha recordado que para Foro Asturias la democracia es un sistema de opinión pública, donde la información veraz y el diálogo son "imprescindibles". En este punto, Álvarez Cascos ha considerado "inquietante" que los partidos mayoritarios hayan tratado de "silenciar la voz de FAC sobre el proceso de privatización de Cajastur", como si de una fuerza marginal se tratase.

Al respecto, quien será previsiblemente elegido presidente regional, ha indicado que la dirección de la Caja les privó de acceder por correo a los 120 consejeros de la entidad, mientras trataba de inculcar su "particular doctrina" a los impositores.

Rebaja de acciones

A su juicio, este ocultismo se hizo extensivo también al contrato de integración y a los próximos pasos de Effibank para "vender acciones con descuentos superiores al 50-60 por ciento", lo que supone una decapitalización del patrimonio acumulado por cinco generaciones de asturianos, "con beneficios para unos pocos directivos sin escrúpulos".

Álvarez-Cascos ha defendido además la "responsabilidad institucional" de su partido, que permitió que muchos asturianos abrieran los ojos sobre "lo que estaban promoviendo los directivos de Cajastur, con el apoyo de los dos partidos de la entente cordial, unidos una vez más en sus comportamientos, en el propio interés de sus cúspides más que en interés de Asturias".

Tras referirse a la fusión entre las cajas asturiana, cántabra y extremeña, como "un expolio consumado", ha reprochado que se les negase "el pan y la palabra", como si solicitar diálogo y reflexión fuese una injerencia inadmisible".

"Los asturianos saben hoy, gracias a Foro Asturias, mucho más de lo que se mueve a sus espaldas, en los despachos de influencias, en torno a los intereses opacos de algunos grupos que se benefician de la crisis pero que no representan a la Asturias honrada y trabajadora", ha concluido.