Urende, cadena de comercialización de electrodomésticos e informática con 23 tiendas y 800 trabajadores en toda España, ha informado a los representantes sindicales de sus empleados que va a presentar un expediente de regulación de empleo (ERE) en el marco del plan de viabilidad que ya anunció que ejecutará, tras acogerse a 'preconcurso' de acreedores.

En declaraciones a Europa Press, el secretario de Acción Sindical del Sindicato Provincial de Comercio, Hostelería y Turismo (Sicoht) de CCOO-Córdoba, Francisco Ramírez, ha explicado que los trabajadores de Urende aún no conocen detalle alguno del referido ERE, ni siquiera si será de carácter temporal o definitivo, ni a que proporción de la plantilla afectará.

Ramírez no descarta que Urende, como consecuencia de este proceso y para asegurar su futura viabilidad, tenga que reducir su tamaño, "pero la intención de CCOO", como sindicato mayoritario en Urende, "es que se mantenga el máximo número de trabajadores", "no habiéndose barajado hasta ahora el cierre", ya que el principal problema de la cadena "es de liquidez", por la deuda que mantiene "con la banca", de unos 180 millones de euros, de ahí que Urende este renegociando las entidades financieras "para poder tener crédito y, por tanto, liquidez".

Ese fue el principal mensaje que transmitieron este mismos mes a representantes de los trabajadores de Urende de Andalucía, Extremadura, Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha y Castilla y León, los máximos responsables de la cadena, con sede central en Córdoba y perteneciente al grupo empresarial Sánchez Ramade, que el pasado 9 de junio se acogió al procedimiento de negociación de deuda de la Ley Concursal, el denominado 'preconcurso' de acreedores.

La cadena de venta de electrodomésticos, informática y electrónica tiene, a partir de dicha fecha, cuatro meses para renegociar su deuda con los acreedores, los cuales, durante este periodo no pueden instar el concurso necesario, y la previsión de Urende, en función del resultado de dicha renegociación, es diseñar un plan de viabilidad, "con el compromiso de tener en cuenta las aportaciones" que se realicen desde CCOO, según ha precisado Ramírez, quien ha insistido en que la empresa "aún no ha aportado documentación alguna" relativa al plan de viabilidad.